El delantero portugués del Real Madrid Cristiano Ronaldo llegó este lunes por la mañana al Juzgado de Instrucción número 1 de Pozuelo de Alarcón (Madrid) para declarar como investigado ante la denuncia de la Fiscalía que le acusa de defraudar 14.7 millones de euros a Hacienda.
Pese a los dos centenares de periodistas de quince países y las cuarenta cámaras de televisión dispuestas en dos hileras tras las vallas de seguridad que le esperaban, el futbolista luso no entró por la puerta principal, sino que lo hizo por el garaje del edificio de oficinas donde está situado el juzgado.
La Fiscalía acusa a Ronaldo de crear una estructura societaria para defraudar 14,7 millones de euros de forma "consciente" y "voluntaria" y le imputa cuatro delitos contra la Hacienda Pública cometidos entre 2011 y 2014, que suponen un fraude de 14,7 millones.
En el escrito enviado a los Juzgados de Instrucción de Pozuelo de Alarcón, el Ministerio Público lo acusa de cuatro delitos contra la Hacienda Pública cometidos entre 2011 y 2014 y que suponen un fraude tributario de 14.768.897 euros. Las cuotas supuestamente defraudadas son de 1,39 millones en 2011, 1,66 en 2012, 3,20 en 2013 y de 8,5 en 2014.