En una noche de fútbol espectacular, el Benfica goleó 4-0 al Atlético Madrid en el Estadio da Luz, en un partido correspondiente a la Champions League. El encuentro comenzó con un gol del turco Kerem Akturkoglu, quien abrió el marcador, y continuó con un penal convertido por Ángel Di María, que amplió la ventaja. El danés Alexander Bah y el neerlandés Orkun Kokcu, también desde los doce pasos, sellaron la histórica victoria.
El primer tiempo no mostró muchas emociones, salvo por la brillante jugada que culminó en el primer gol. Fredrik Aursnes asistió a Akturkoglu, quien no dudó en convertir. Di María, con su habilidad y movimientos, fue clave para abrir espacios, pero el Benfica no logró concretar más ocasiones antes del descanso.
La segunda mitad fue un festín para los locales. Apenas siete minutos después de reanudarse, Di María amplió la ventaja desde el punto penal, sentenciando la tensión del partido. A partir de allí, el Benfica se adueñó del juego, perdiéndose varias oportunidades de gol, incluyendo un mano a mano que Oblak logró atajar.
El tercer tanto llegó de la mano de Alexander Bah a quince minutos del final, dejando prácticamente sin opciones al Atlético, que no logró reaccionar. En un colofón a la humillación, un nuevo penal a favor del Benfica fue convertido por Orkun Kokcu, reflejando la desesperación del equipo colchonero.
El Cholo Simeone abandonó el campo visiblemente ofuscado por el rendimiento de su equipo, que contó con la participación de Rodrigo De Paul, Nahuel Molina, Julián Álvarez y Ángel Correa, pero que no pudo encontrar el rumbo en un partido dominado por las Águilas. Con este resultado, el Benfica se posiciona como uno de los grandes favoritos en la competición europea.
