Tras la catastrófica caída sufrida por 1 a 0 ante el desconocido Deportivo Capiatá en la mismísima Bombonera, Boca debía ir a Paraguay a sacar adelante su estirpe copera para revertir la serie de Octavos de la Sudamericana y meterse en los Cuartos de Final. Aunque sufrió demasiado, logró el gol que le permitió estirar la definición a los penales. Allí, Agustín Orion se convirtió en héroe y salvó a quien había sido la figura 'xeneize' durante el tiempo reglamentario, Claudio Pérez, que falló su disparo desde los doce pasos.
"No quiero volver a ver el penal que erré. Lo pateé horrible, me pegué un cagazo bárbaro, por suerte nos salvó Orion y no quedamos afuera", reconoció el Chiqui. Aunque igual aclaró: "Jugué un buen partido, salvo el penal, me fui conforme".
En tanto, el defensor no tuvo reparos en reconocer lo complicado que hubiera resultado no seguir con vida en el certamen: "Si no pasábamos a Capiatá, nos iban a matar a todos. Quedar afuera de una Copa internacional hubiera sido bastante feo para Boca que está acostumbrado a finales. Encima Capiatá es un equipo denominado chico con poca historia. Por suerte el gol de Jona nos dio tranquilidad y después llegaron los penales, pero ellos hicieron un gran partido".
"Hay muchos partidos antes de que se pueda dar esa Semifinal, pero obvio que si toca River va a ser un partido muy especial, va a ser un lindo partido. Pero primero está lo primero", manifestó el ilusionado central. Y continuó: "Ellos están en buena racha, pero nosotros estamos haciendo nuestro laburo y estamos en levantada. Lo importante es que nosotros hagamos nuestro laburo. Estamos en levantada y ojalá terminemos de la mejor manera".
Y cerró haciendo referencia a su presente: "Hay que demostrar cada día por qué llegué a Boca. Demostrar que estoy a la altura de un club como Boca. El Vasco confiaba plenamente en todos, siempre nos decía que nadie se baje, que entrenemos. Estamos todos metidos y en condiciones para hacer lo mejor posible cuando nos toque jugar".