En el arranque de la duodécima fecha de Eliminatorias Sudamericanas, Bolivia pisó fuerte en la altura de La Paz, le ganó 1-0 a Paraguay y le dio una mano a la Selección Argentina.
En un partido que fue de ida y vuelta durante los noventa minutos, las acciones se repartieron constantemente de manera alternada, por lo que ambos seleccionados coquetearon con la posibilidad de marcar repetidas veces.
A pesar del alto caudal de situaciones, el primer tanto del partido llegó recién a los 33 minutos del complemento: Marcelo Martins realizó una buena acción individual en la que gambeteó hasta al arquero, tiró el centro atrás y Gustavo Gómez, en su intento por cerrar, terminó metiéndola en su propia valla.
A partir de ahí, Paraguay fue en busca del empate agónico pero no pudo romper la férrea resistencia del conjunto boliviano, que logró romper la mala racha de cuatro partidos consecutivos sin victorias y salir de la última ubicación de la tabla de posiciones.
En tanto, Paraguay desperdició su posibilidad de superar a Argentina y quedó con 15 unidades, afuera de la zona de clasificación.
