Intensidad defensiva y paciencia en ataque. Las mismas herramientas que le permitieron a Echagüe romper de entrada el duelo ante Santa Paula, le dieron la oportunidad de abrir rápidamente el choque frente a Atlético Tala. La movilidad de balón, aprovechando la inteligencia de Sandrini, y los lanzamientos externos lo pusieron con 20 de ventaja promediando el segundo cuarto (33-13).
Gracias a esto, Ignacio Barsanti pudo, primero, probar diversas situaciones con sus titulares en cancha y, más adelante, apelar a la rotación. La visita supo aprovechar los momentos de sequía en ataque del Negro -todavía en construcción ? para descontar. Lo hizo en el cierre de la primera mitad (41-26) y en el final del tercer cuarto (56-43).
Cuando pudo rotar la pelota, el AEC fue un equipo interesante, en búsqueda de la mejor opción. Con esa premisa mantuvo una distancia cercana a la doble decena durante gran parte del tercer período. Asimismo, cuando perdió claridad en ofensiva, demostró que ha asumido el compromiso de no negociar la defensa ni el cuidado de los rebotes, lo que le permitió salir de ese bache sin mayores sobresaltos.
El primer susto real lo tuvo entrando en los últimos cuatro minutos de juego, en los que acumuló pérdidas y dejó correr a su rival. No obstante, la diferencia nunca fue menor a 10. Jeremías Sandrini le aportó soluciones para evitar una reacción definitiva de los talenses y finalmente la victoria fue para los capitalinos por 71-57, consigna La Cabala.
El próximo compromiso del elenco de calle 25 de mayo será el próximo viernes, cuando reciba en el Butta a Olimpia. Para ese juego, ya podría contar con su extranjero, Jerome Hill, que este miércoles arribaría a Paraná