Cifras que se actualizan día a día, hora a hora, son el subproducto de la pandemia de coronavirus. Pero esos números tienen un correlato de historias de vida, muchas veces dramáticas. Una de ellas es la de Walter Montillo?, quien en los últimos días perdió a su padre, como consecuencia del COVID-19, y a su abuelo, y espera buenas noticias sobre la evolución de su madre, también afectada por el virus.
"Me golpeó lo de mi viejo. Hacía tiempo que estábamos distanciados, cerca de seis años. El año pasado habíamos empezado a hablarnos nuevamente, íbamos de a poco, estábamos ahí y pasó esto. Me hubiese gustado arreglar todo antes, pero no tuvimos la chance", contó el mediocampista, quien cumple la cuarentena? en Santiago, ya que es jugador en Universidad de Chile.
Walter Oscar Montillo, de 61 años y padre del futbolista, falleció el 7 de abril en el Instituto Médico Brandsen de esa localidad, donde estaba cumpliendo el aislamiento obligatorio en la quinta familiar. Horas después de su muerte, se comprobó que padecía coronavirus, Su padre, Oscar Montillo, de 92, había muerto seis días antes. En ese caso y más allá de las sospechas, no llegó a comprobarse si había estado afectado por el virus.
"A veces la vida golpea, pero hay que seguir, ponerle el pecho. Mi señora y mis hijos necesitan que yo esté bien. Seguimos pasando el duelo, recordando a mi viejo en los momentos buenos y no cuando hubo problemas. Es la mejor manera de rememorarlo", añadió el ex jugador de San Lorenzo, Tigre?, Cruzeiro, Santos, Morelia de México y Shandong Luneng de China.
El enganche ahora aguarda la recuperación de su madre, Marta, quien se encuentra internada en el IMB y está siendo acompañada por Sabrina, la hermana mayor del jugador.
"Está aislada, pero no presenta ningún síntoma y se encuentra bien. Le van a hacer otro test y esperamos que no arroje nada, porque si sale dos veces negativo, le darán el alta. La acompaño por teléfono, es lo que me queda", contó Montillo en una entrevista publicada en el diario El Mercurio.
El campeón de la Copa Superliga 2019 con Tigre lamentó estar lejos de su madre: "Desde lejos, uno no puede ayudar y eso es lo que más me duele. Una vez que aíslan a las personas, hay que creer en los médicos y rogar que todo salga bien. Lamentablemente, con mi abuelo y mi papá no pasó, pero mi vieja está luchándola y eso me pone contento", sostuvo.
El mediocampista, que cumple la cuarentena junto a su esposa y sus hijos, aseguró que él, "como personaje público", debía "dar el ejemplo" porque "cuanta más gente se quede en casa, más controlado estará el virus".
"Al que más le cuesta estar encerrado en el departamento es a Santino, porque tiene sus terapias (tiene síndrome de Down) y con esto empieza a perder su trabajo diario, pero tratamos de apoyarlo con videos de amigos o de algún profesional. Valentín, que está más grande, se aburre, pero está en contacto con los amigos", explicó.
Montillo contó que había aprovechado al máximo las horas libres que le da el encierro: "Acabo de terminar un curso de Photoshop, tomé otro de inglés, leo libros y llamo a mis amigos. Antes hice cursos a distancia de coaching y de edición de videos. Tengo pensado trabajar con chicos mediante la representación y esto está relacionado".
El enganche de 36 años tiene contrato con Universidad de Chile hasta diciembre y, en principio, tiene previsto retirarse en ese momento. "Por el momento, éste es el último año. En noviembre evaluaré si estoy para seguir o para dar un paso al costado. Es una decisión familiar".
En lo que Montillo no tiene dudas es respecto a cuál será la última casaca que vestirá como profesional. "Quiero que la U sea mi último equipo. Soy muy autocrítico y quiero irme bien, siendo importante dentro de la cancha y ojalá siendo campeón", se ilusionó.