Este viernes la jornada del Masters de Augusta quedó marcada por un hecho inédito que generó susto en los espectadores, la prensa y los golfistas luego de que un árbol de varios metros de altura cayera sobre una zona en donde había decenas de fanáticos.
Según los primeros reportes, no hubo heridos de gravedad, más allá de quienes fueron alcanzador por algunas ramas, sin que les generaran lesiones. El hecho fue captado por las cámaras de televisión y el video se viralizó de inmediato en las redes sociales.
Producto de los fuertes vientos, un pino cayó cerca del hoyo 17 y poco después los responsables del Masters de Augusta informaron que lo mejor era suspender la actividad por hoy debido a que el clima estaba entorpeciendo la jornada.
<blockquote class="twitter-tweet"><p lang="en" dir="ltr">well THIS was terrifying <a href="https://t.co/qfIm2w4zKW">pic.twitter.com/qfIm2w4zKW</a></p>— Timothy Burke (@bubbaprog) <a href="https://twitter.com/bubbaprog/status/1644438525784510465?ref_src=twsrc%5Etfw">April 7, 2023</a></blockquote> <script async src="https://platform.twitter.com/widgets.js" charset="utf-8"></script>
El juego de la segunda ronda se detuvo por segunda vez el viernes en el 87º Masters cuando una peligrosa tormenta con fuertes lluvias, viento y relámpagos se acercó al Augusta National Golf Club. Los oficiales del torneo sacaron a los jugadores del campo, a diferencia del paro de la tarde anterior, que duró solo 21 minutos.
El último cierre se produjo con 39 golfistas que aún no completaron sus segundas rondas. El estadounidense Brooks Koepka tenía la ventaja inicial en la casa club, tres golpes por delante del tercer clasificado español Jon Rahm, que todavía tenía los últimos nueve para terminar, y cuatro golpes por delante del campeón estadounidense amateur Sam Bennett. Rory McIlroy y Tiger Woods corrían el riesgo de perder el corte en las rondas restantes.