Sociedad Sequía en el sur de Córdoba

Una laguna se quedó sin agua y perdió su flora y su fauna

A raíz de la falta de lluvias que afecta a todo el país desde hace meses, una laguna del sur de Córdoba se secó y quedó sin flora ni fauna. Se trata de la laguna La Brava ubicada a unos 20 kilómetros al este de La Carlota.

17 de Enero de 2023

El panorama es desolador: las 100 hectáreas que abarcan un sector rural entre La Carlota y Canals, en el Departamento Unión, se quedaron sin su espejo de agua.

 

“Desde hace 29 años que vivimos en este lugar nunca vimos que la laguna se seque de esta manera. Desde hace dos meses vemos que aparecían peces muertos en las orillas. Ahora ya no queda nada, de nada”, contó a Puntal Andrea Pedraza, una tambera que vive en Paraje Olmos y que llevaba sus animales a pastar y tomar agua al lugar.

 

“Desde hace más de un mes y medio que no largo las vacas, porque ahora se empantanan y mueren ahí. No hay forma de sacarlas”, agregó.

 

La laguna se alimenta de sus propias vertientes, de los excesos hídricos de La Carlota, de la zona de Viamonte y hasta del río Quinto.

 

Sin embargo, la extrema sequía la dejó sin una gota de agua y la base de la laguna luce con el cuarteado característico de una zona que quedó seca.

 

 

Además, por la falta de agua se puede observar la cantidad de basura que se arrojaba al lugar como restos de vehículos, tanques de GNC y distintos elementos.

 

La Brava no es la única laguna golpeada por la sequía en Córdoba. Otros reservorios de agua próximos como la laguna Camoatí muestran la misma situación.

 

Vecinos del sector y personas que acostumbraban a pescar en La Brava contaron que el nivel de agua llegaba a medio metro de la estructura de hierro del puente carretero, que ahora muestra sus bases al descubierto.

 

“Nunca en estos 29 años vi algo así. Por el 2000 hubo una sequía, pero no tan grande como esta. Para que vuelva a aparecer la laguna tiene que llover y mucho, no solo acá, sino en toda la zona. Primero se tienen que llenar los canales que desaguan acá y que las vertientes vuelvan a surgir”, contó un vecino de Olmos.

 

 

 

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