<b>Fuente: La Cábala</b>
No fue una derrota común la sufrida ante San Isidro el pasado miércoles. Es que más allá de la desazón y la bronca por volver a dejar escapar un partido en condición de local, el presente que arrastra el equipo de Ignacio Barsanti hizo que sean muchos más los aspectos a rescatar que los criticables, a diferencia de lo ocurrido en los partidos anteriores.
En primer lugar, apareció una mayor actitud, entrega y compromiso durante prácticamente todo el juego. Luego, más importante aún, se vieron ráfagas de buen juego colectivo y solidario en ataque, como así también se pudieron aprovechar muchas más situaciones de contragolpe que en cotejos anteriores.
Con Kirkland encendido (24), más el aporte de siempre de González y Ruiz Moreno, sumado a un buen partido de Stival, en una de sus mejores presentaciones (sino la mejor hasta el momento) con la camiseta del AEC, el elenco de calle 25 de mayo complicó por muchos momentos al mejor equipo del grupo. Sin embargo, los Halcones lo ganaron por la enorme efectividad desde los 6,75 y la incansable cantidad de variantes en ofensiva que encuentra. En tanto, Echagüe solo tuvo 1 punto desde el banco en 40 minutos. Le costó la rotación, dio ventajas en ese aspecto y ante un rival como los de San Francisco, se termina pagando caro.
Sin embargo, después de tres cruces muy difíciles, hoy se vuelve a enfrentar con uno más terrenal, sabiendo además que de ganar abandonará no solo una racha de siete sin victorias (el último triunfo fue el 16/10) sino además el último lugar de la Región Centro-Norte. Con algo de lo mostrado ante el CASI y con una intensidad durante gran parte del juego, hay confianza y convicción de poder traer los dos puntos a Paraná y empezar a recuperar lo perdido en el Butta, especialmente con Platense y Tiro Federal, partidos con los que hoy otra sería la historia.
Para ello deberá recuperar, además, el arma principal del equipo: la defensa. Echagüe viene de sufrir en los dos partidos con el más goleador del TNA, que le marcó 92 y 93, más 85 de La Unión, números que hacen realmente difícil poder quedarse con los juegos. Parque no tiene ese poder de goleo, es por eso que aparece como un contrincante al que un buen cerrojo defensivo le corte las ideas y después lo pueda liquidar con algo del juego ofensivo que se viene mostrando en alza y que solo necesita aceitarse un poquito más.
El Verde, sin embargo, luego de un muy mal arranque en el torneo viene de ganar dos partidos seguidos en condición de local, frente a Tiro Federal 85-76 y San Isidro, 81-76. Nicolás Lauría, con 24 puntos, fue la figura en el conjunto cordobés durante el juego anterior, y con 15,4 puntos por partido comparte las mayores responsabilidades ofensivas con Andrés Mariani (15,8).