Según informó la Cancillería hubo una charla entre el presidente Mauricio Macri y su par ruso, Vladimir Putin; tras la misma Putin puso a "disposición inmediata un buque oceanográfico de alta complejidad", especial para este tipo de operaciones. Los rusos son expertos en mares y en equipamiento militar. Por cierto, Putin mismo debió enfrentar la tragedia del submarino Kursk, que en agosto de 2000 se hundió con una tripulación de 118 personas bordo en el mar de Barents, al norte de Rusia.

Además, un buque polar y helicópteros rusos hicieron toda la campaña antártica argentina durante la ausencia del Irizar.

Este miércoles temprano, el canciller Jorge Faurie y el vicecanciller Daniel Raimondi estuvieron en la Casa Rosada en reuniones de seguimiento de la agenda internacional. El Ministerio de Relaciones Exteriores sacó anoche un comunicado de agradecimiento a Alemania, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, España, Estados Unidos, Francia, Noruega, Perú, Reino Unido y Uruguay, los países que participan de diversas maneras en la búsqueda del ARA San Juan. La Cancillería informó que el ministro de Defensa Oscar Aguad hablará en las próximas horas con su par ruso.

Los preparativos del llamado fueron coordinados por el secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia, Fulvio Pompeo, secretario de Asuntos Estratégicos y el embajador argentino en Moscú, Ricardo Lagorio.

También trascendió que el embajador chino en Argentina, Wanming Yang, ofreció la ayuda pero por ahora no hubo avances.

Sin embargo, aunque toda la participación de la fuerza internacional dispuesta en el Atlántico Sur está regida por códigos humanitarios y el Convenio internacional sobre búsqueda y salvamento marítimos (SAR) -que no precisa de autorizaciones del Congreso por ejemplo- la entrada de los rusos en acción puede generar alguna resistencia de los estadounidenses. La presencia de las fuerzas de Washington y de Londres es la más visible en los mares argentinos hoy.