Dieciocho días después del entrenamiento en el que Sergio Romero agravó su lesión y quedó desafectado de la Selección Argentina, el arquero rompió el silencio. Recién operado y en directo desde Barcelona, el jugador de Manchester aseguró que "la lesión es del 2004" y que llegaba a atajar contra Islandia.
"Cuando me operaron a los 17 años quedó un fragmento suelto adentro de la rodilla, pero alojado en la parte posterior", comenzó explicando Chiquito, quien a pesar del inconveniente pudo hacerse el camino para cumplir el sueño de atajar en Copa América e incluso el Mundial.
Sin embargo, el mayor problema apareció luego del partido contra España. "El golpe fue durísimo", comentó el guardameta. Ya en Argentina, el tema empeoró: "En el segundo entrenamiento sentí un 'crack'. Cuando hablé con los doctores me dijeron que tenían que sacármelo porque tal vez me pasaba en un partido y no me iba a dejar caminar".
Acto seguido, el ex Racing se comunicó con el cuerpo técnico: "Hablé con Jorge, le expliqué la situación y los tiempos de recuperación. Le dije que no tenía nada roto, que tenía un fragmento suelto hace 10 años que había que retirar y le aseguré que iba a estar disponible en 10 días para atajar contra Islandia", contó el oriundo de Bernardo de Irigoyen, quien al mismo tiempo reveló: "Yo no creía que iba a ser titular, yo sabía que iba a ser titular", y dejó una frase que demuestra su absoluta seguridad y la firmeza de su lazo con la Albiceleste: "Mi carrera en la Selección Argentina no terminó. Me voy a recuperar y voy a volver".
En cuanto a la determinación que tomó el entrenador de sacarlo de la lista, el portero señaló: "Los tiempos de Sampaoli y el cuerpo técnico eran otros. Querían a una persona que entren todos los días y me desafectaron a las 4 horas", y aclaró: "No estoy enojado ni dolido con Sampaoli por su decisión, si estoy caliente con los que dijeron que le lloré a él para estar".
Finalmente, el arquero con más presencias en la historia del representativo nacional se refirió a su posible reemplazante, lugar por el que pelean el entrerriano Wilfredo Caballero, Franco Armani y Nahuel Guzmán. "Cualquiera de los tres arqueros está en condiciones de atajar", aseguró el misionero,, y finalizó diciendo: "Si a ellos les va bien, a la Selección también, y eso es lo que importa".