"En ningún momento tuve la intención de faltarles el respeto al club ni a la afición de Boca Juniors. Mucho menos pretendí faltarles el respeto a los argentinos, nuestra nación hermana", comenzó su discurso Romario.
"En la entrevista hablamos en el lenguaje del fútbol, siempre con mucha pasión y energía, pero nunca con intención de faltarle el respeto, sino todo lo contrario. Lo que nos mueve es lo mismo, son las ganas de ver una demostración de habilidad, técnica y muchas ganas", aseguró mientras intentó aclarar que sus palabras estaban dentro del "Folclore".
No obstante, Romario quiso justificarse y alegó que no era una disculpa, sino que una aclaración de lo sucedido: "Esto no es una disculpa porque realmente no creo haberle faltado el respeto a nadie, esa nunca fue la intención. Esta es solo una forma de aclarar lo dicho".
"Por mucha rivalidad que haya habido en el fútbol siempre he sido respetado y muy querido en Argentina", recalcó. "Tanto como jugador como en las visitas que realicé, siempre recibí mucha alegría y cariño genuino de cada persona que conocí. Es admirable la pasión de los argentinos por el fútbol y el respeto que tienen por quienes comparten este amor. Y por eso tengo una relación muy fraternal con ellos".
"Soy brasileño, soy de Río, jugué en el Fluminense y voy a apoyarlos, por supuesto. Veo que el 'Fluzão' está en plenas condiciones de ser campeón, aunque será uno de los partidos más difíciles de los últimos tiempos. Será un partido de brasileños y argentinos. Seremos oponentes en el campo, pero siempre hermanos en esta gran nación futbolística", agregó. (NA)