Los restos de un ritual con animales sacrificados fueron hallados este martes en la esquina de calles España y Libertad, en Paraná. Se trató de una caja con dos gallinas muertas, dos botellas de champagne, dos copas con vestigios de sangre, además de rosas rojas y blancas, cigarrillos, bombones, pochoclos, una carta de un 10 de espadas, una vela roja y un blíster de pastillas. Según las imágenes a las que accedió Elonce, las píldoras serían anticonceptivos hormonales.
Elonce consultó a Daniel, de Santería El Andén, quien explicó que se trataría de “ofrendas que se hacen en agradecimiento porque la persona logró un objetivo o se le cumplió un pedido importante”.
“Las manzanas, los pochoclos y velas son en agradecimiento a un pedido que se ha hecho; es una devolución que se le hace a la deidad a la que se le pidió el favor”, explicó. Y comentó que “el maíz es para la prosperidad y la abundancia, el bienestar económico”. Mencionó, además, que “las velas rojas son una luz para iluminar aperturas”. De hecho, refirió que en los rituales “siempre se utilizan velas porque brindan energía”.
Respecto de las botellas de champagne y los chocolates, el consultado comparó este tipo de ofrendas con las que se observan en las grutas del Gauchito Gil “porque son cosas que agradan a la deidad a la que se le hizo el pedido”.
El dueño de la santería, si bien reconoció en el ritual “impresiona el sacrificio de animales”, aclaró que a través de esa práctica “se pretende la entrega de una vida por otra, entonces, se sacrifica un animal para lograr un cambio en la vida que uno llevaba porque gracias a la deidad a la que le pidió, poder lograrlo”.
Recomiendan "no asustarse ni preocuparse"
“La religión umbanda hace ese tipo de ofrendas y las coloca en cruces de calles, en lugares donde hay corrientes de agua o en caminos importantes porque se busca significar que la ofrenda fluya”, explicó Daniel al estimar que, para los practicantes de ese culto, “las energías dan vueltas y se puede conectar con éstas, por eso se buscan lugares apartados; también es para no llamar tanto la atención de quien podría asustarse porque no conoce este tipo de rituales”.
Y agregó: “Como toda religión tiene adeptos que la practican, pero no es una cuestión ni para asustarse ni para preocuparse porque ellos creen en una religión diferente a la católica”.
El entrevistado, al dar cuenta de las ofrendas y los rituales, comparó que “la religión umbanda tiene mucha correlatividad con santos de la religión católica”.
Finalmente, para deshacerse de los restos de los rituales, Daniel recomendó que “lo más aconsejable es juntarlo en una bolsa de residuos y dejarlo en el contenedor de basura”. “No hay que ingresarlos a los domicilios para no crear una sugestión o una falsa creencia respecto de que podría llegar a perjudicarnos”, cerró. (Elonce)