Mariano Werner logró 2 títulos consecutivos de Turismo Carretera con distintos equipos y autos. Incluso en temporadas con características completamente diferentes: en 2020 con un torneo compacto, condicionado e interrumpido por la pandemia; y en 2021 en uno en pleno proceso de retorno a la nueva normalidad. ¿Qué fue lo único que mantuvo? El grupo humano, su receta del éxito.
"Cuando Agustín Canapino ganaba los campeonatos, yo veía y admiraba que siempre mantenía a los mismos mecánicos, que lo tenía a Alberto atrás de todo, que sostenían al motorista un poco exclusivo. Y hoy puedo ver que pudimos copiar lo bueno que en su momento tuvo él", admitió Werner en diálogo con SoloTC.
Mariano pone en primer lugar, y sin dudarlo, al grupo de trabajo que lo acompaña independientemente del equipo bajo el cual compita. Un plantel de 11 personas que lo sigue a todos lados "en bloque", como dice el campeón. De ellos, 8 pertenecen al plantel oficial, con mecánicos, chofer y cocinero. Y los otros 3 son laderos externos, como el motorista "Rody" Agut, quien delega en Aldo -El Indio- el armado del multiválvulas Ford y la asistencia permanente en el box, y el consultor técnico Marcos Laborda.
"Los logros, incluso ante la adversidad, los atribuyo al trabajo y al empeño que le ponen los chicos del equipo. Estamos todos hermanados, desde los chicos del taller hasta el motorista. Tengo un grupo humano joven, que trabaja en el auto los 365 días del año. Y el mismo plantel que trabaja en el Ford durante la semana es el mismo que va a las carreras, cosa que por ahí no pasa en todos los equipos", le contó a STC.
Los soldados del campeón son "Christian Frank e Ignacio Saumell, quienes están como encargados del auto; René Spadillero, que día a día se ocupa de que no le falte nada a los encargados del auto; Valentín Brusa un chico de 20 años, estudiante de ingeniería, que encontré el año pasado con un futuro increíble y es el 2° mecánico; Ramón Rodríguez, encargado de la caja y diferencial, y da una mano grande en puesta a punto; Mateo Ormaechea, el encargado del semirremolque; Coco, el chofer del "semi"; y Rubén Varisco, que cocina a todo el staff en las carreras".
"A los chicos los conozco desde que estaban conmigo en mi taller de Paraná. Cuando lamentablemente tuve que cerrar, los recomendé a todos para ir a los equipos donde iba, porque sé la calidad humana que tienen. Ellos fueron viviendo por distintos lugares del país y eso habla de un grupo humano con mucha pasión. Y eso no hay con qué pagarlo", explicó el bicampeón.
Tras dejar su estructura en 2018, al año siguiente se sumó al DTA Racing y los mecánicos se mudaron a San Nicolás. En 2020, ya bajo el concepto Memo Corse, Marcelo Occhionero decidió trasladar el auto de Mariano al Azul Sport Team a mitad de temporada. A vivir a Azul fueron también los mecánicos del entrerriano. Hasta que en 2021 volvieron a su tierra, con el retorno al equipo de Omar Martínez. Y por eso el proyecto 2022 no tendrá base en Campana, como estaba pensado, por pedido de ellos "para estar un tiempo más en sus casas".
"Rescato la pasión con la que trabaja el grupo. Que tengan la camiseta puesta y que no se relajen nunca. Para mí eso vale más que cualquier otra cosa. Nunca nos damos un respiro. El objetivo es no relajarse en ninguna de las 15 carreras", reafirma el referente de Ford, que cuida ese activo como nadie. Sabe el valor que tiene el grupo en sus logros. Por eso dejó el Memo Corse cuando el planteo de Occhionero para 2021 lo obligaba a desprenderse de sus mecánicos y de Agut para tener en la atención del multiválvulas a Fernando García y a personal propio para la atención del auto.
Werner no solamente tiene capital humano, sino cierta infraestructura propia que traslada al taller donde vaya. "Todo lo que necesitamos en el taller (herramientas y elementos) y para llevar a la carrera, es nuestro. Incluso un semirremolque", advierte el bicampeón de TC. Son las cosas que quedaron de su equipo y que recuperó nuevamente tras haberlas comprado Occhionero.
Werner logró 2° títulos consecutivo en el TC. Logros deportivos nada sencillos en el automovilismo argentino actual, y mucho menos en las condiciones en las que los alcanzó. Porque el entrerriano se coronó en cada año con un Ford distinto (para este torneo estrenó un auto 0 km) y con estructuras diferentes (primero con el Memo Corse y en 2 equipos; y este año con el Gurí Martínez Competición). Pero tiene la forma que de mantener el foco en el funcionamiento del auto, independientemente del contexto, dando batalla con los soldados del campeón.