Jorge Comas, exfutbolista de Vélez y Boca, se encuentra detenido en México tras haber sido acusado de agredir e insultar a unas vecinas de tercera edad de su edificio. Las denunciantes aseguraron que el argentino de 61 años tuvo actitudes groseras y luego tiró piedras.
La jueza Aracely Estrada dictó la prisión preventiva oficiosa para el exdelantero que a fines de la década del '80 también se desempeñó en Tiburones Rojos de Veracruz, luego de entrar en contacto con las pruebas y escuchar distintos testimonios del hecho.
El 11 de junio, Comas deberá presentarse en la corte para una audiencia. Sin embargo, no podrá recuperar su libertad mientras se lleva adelante la investigación sobre lo ocurrido.
No es la primera vez que Jorge Comas sale en los medios por conflictos de este estilo. En septiembre de 2012 había sido detenido luego de golpear, causarle lesiones y agredir al periodista Jorge Rocha Solano cuando se encontraban en el restaurante Larry Moon, propiedad del comunicador.
"Me da mucha pena este hecho. Yo tuve por Comas una gran admiración y cariño, y años después de ser futbolista, tuve la oportunidad de ser una persona cercana a él y de apoyarlo en la medida de mis posibilidades, pero comprobé que es alcohólico y se descontrola", señaló Rocha Solano en aquel entonces.
En julio de 2016 volvió a ser arrestado por agredir a una personas que se encontraba en el mismo restaurante que él, en la ciudad de Veracruz. En aquel momento se difundió un video en las redes sociales en la que el exfutbolista se encontraba en custodia de la policía y era acusado de causar disturbios luego de haber tomado alcohol.
<b>Jorge Comas cumplió 61 años</b>
Este miércoles, el exdelantero Jorge Comas cumplió 61 años. De todas formas, deberá pasar su día en la prisión por el conflicto señalado anteriormente.
"Comitas" -como se lo conocía en su etapa de futbolista- dio sus primeros pasos en los clubes Belgrano y Patronato de Paraná, su ciudad natal. Su debut lo hizo en 1980 con la camiseta de Colón de Santa Fe y sus buenas actuaciones lo llevaron primero a Vélez (1980-1985) y luego a Boca (1985-1989), donde guardan un gran recuerdo de este goleador.
Su carrera tuvo espacio para un gran paso por el fútbol mexicano. Entre 1989 y 1994, defendió los colores del desaparecido club Tiburones Rojos de Veracruz, donde es considerado uno de los mayores ídolos de su historia.