Sin lugar a dudas, Néstor Ortigoza es el futbolista más influyente de los últimos cinco años de San Lorenzo porque la historia no arranca el día que pateó el penal contra Nacional, sino que comienza cuando ejecutó el penal que le hizo a Instituto y salvó a los de Boedo del descenso. Y antes de jugar la Final con los paraguayos había sido el jugador más regular del equipo en la Copa Libertadores 2014. Pero actualmente está complicada su continuidad, algo que el propio jugador reconoció este martes: "Es difícil que me quede en San Lorenzo". Y agregó: "Hace seis meses tenía un pensamiento y ahora tengo otro. El fútbol es cambiante". Orti fue claro en relación a lo que había dicho hace un tiempo sobre su estadía en el club. "No estoy peleado con los dirigentes, siempre me manejé bien. Hablamos, pero nunca discutimos ni nada", tiró.
El mediocampista del Azulgrana, que tiene contrato hasta el 30 de junio, demostró todo su afecto con el club y con los hinchas. "Cada vez que me ovacionan me pone feliz. El otro día fue impresionante", soltó Jonny. Y continuó: "La gente de San Lorenzo jamás se va a olvidar de mí. Ojalá me despidan de la mejor manera cuando me toque ir". Con un tono de despedida, el Gordo reconoció todo lo que significa el Ciclón para él.
"Amo a San Lorenzo. Pase cosas buenas y malas. Estoy agradecido a al club que me abrió las puertas", aclaró. Pero también aceptó que dejó lo mejor de él: "Duermo tranquilo. Siempre di todo por San Lorenzo. Es más, el viernes tuve 40 grados de fiebre. Y el domingo me sentía muy mareado, me temblaban las patas pero salí igual a jugar, ja".
El ex Argentinos fue tajante con su posible salida y aseguró que el tema lo están manejando con Gustavo, su hermano y representante, de la mejor forma. "Mi hermano tiene prohibido hablar con otros clubes hasta el 30 de junio. Mi cabeza está en San Lorenzo", aclaró. Ortigoza le puso onda e ironizó un poco por si no llega a encontrar club a partir de junio. "En junio me quedo unos días sin laburo y me voy a laburar con mi señora, ja. Mi idea es dejar el fútbol y que el fútbol no me deje a mí", tiró entre risas.