Martín Firpo, el único detenido por el la agresión al micro de Boca, fue liberado tras reconocer su responsabilidad en el ataque. El hombre acordó con la jueza de la causa, María Julia Correa, titular del Juzgado Penal, Contravencional y de Faltas Nº 28, un juicio abreviado que lo puede condenar a dos años y cuatros meses de prisión, aunque vale resaltar que la pena es excarcelable.

Según informan las fuentes vinculadas al caso, Firpo deberá cumplir 180 horas de tareas comunitarias y no podrá volver a pisar un estadio de fútbol. También se le prohibió el ingreso al Monumental más allá de lo que haga River con respecto a su lugar como socio del club.

Según había informado la fiscal de la causa, Adriana Bellavigna, Firpo está imputado "por cometer varios delitos durante los incidentes ocurridos contra el ómnibus del equipo del club Boca".

Por otro lado indicó que quienes realizaron el operativo "deberán explicar por qué no se puso una valla" en la esquina de Libertador y Lidoro Quinteros, donde fue apedreado el ómnibus que trasladaba al plantel "xeneize".

Además, expresa que "a partir de dicho sumario, se elevará el pedido de expulsión como socio de la Institución a Comisión Directiva y a la Asamblea de Representante de Socios".

"Por otro lado -agrega-, River Plate le solicitará a los organismos de seguridad que el agresor sea incluido en el derecho de admisión para concurrir a los estadios de fútbol".

River lo expulsará. Las autoridades del club de Núñez resolvieron abrirle un sumario y que se eleve un pedido de expulsión del club. Según un comunicado que emitió la institución de Nuñez, "el Departamento Técnico-Legal le abrió un sumario interno y se procedió a la suspensión inmediata del socio".