El serbio Novak Djokovic derrotó fácilmente al español Rafael Nadal por un doble 6-2, y se quedó con el ATP 500 de Pekín. Fue la 45º vez que ambos se enfrentaban. En el historial, Nadal domina a Djokovic por 23 triunfos a 22, pero el serbio le ganó los tres últimos -este año en semifinales de Montecarlo y luego en cuartos de final de Roland Garros, antes de la final en Pekín-.
El Abierto de China se disputó sobre superficie dura y repartó 2.700.510 millones de dólares en premios. Pese a la derrota, Nadal se había mostrado ayer muy contento con su semana, estaba feliz de haber podido llegar otra vez a una final y había anticipado que la de hoy era "un partido para disfrutar".
Tras una temporada para el olvido, Nadal había conseguido recuperar algunos destellos de su nivel. Sin embargo, encontró en Djokovic una barrera demasiado alta. El serbio quebró ya en la primera oportunidad que tuvo en el primer game del partido y desde entonces no soltó el encuentro.
Tras perder el primer set en 41 puntos, Nadal pidió asistencia en el inicio del segundo por un dolor en el pie. Djokovic olió sangre y no perdonó, ya que quebró enseguida para llevarse con sencillez también el segundo capítulo. El serbio capturó así el título número 56 de su carrera y el octavo de una temporada en la que tiene una impresionante marca de 68 partidos ganados y cinco perdidos.