El español Rafael Nadal confesó que jugó su primer gran partido de este 2018 en los octavos de final del Abierto de Australia, instancia en la que tuvo que esforzarse más de lo normal para eliminar a Diego Schwartzman.

El número 1 del mundo elogió el juego y el desempeño del Peque, aunque hizo hincapié en un punto que no le juega a favor al argentino en su deseo de estar entre los mejores del circuito: su baja estatura (1,67m).

"Evidentemente en tenis, para aspirar a ser un súper súper top (sic), con su estatura esta más complicado porque al final tienes un hándicap que es el saque, que con esa altura puedes sacar bien pero no muy bien y a día de hoy, así como funciona el tenis, desgraciadamente o no, el servicio tiene demasiado impacto en el juego", explicó Nadal.

El nacido en Manacor agregó que "el ser bajo, si eres rápido, tiene cosas buenas como que tienes la pelota siempre cerca de ti", pero volvió a destacar que al momento de lograr los resultados es necesario tener algunos centímetros más de estatura.

"Es un excelente jugador en todos los aspectos. Hoy sacaba muy bien, lo que no ocurre siempre. Fue una gran batalla", cerró Nadal.