La reconocida periodista y escritora Beatriz Sarlo murió en la madrugada de este martes a los 82 años. Según se informó, permanecía internada desde hace tres semanas en el Sanatorio Otamendi, ubicado en la ciudad de Buenos Aires, luego de sufrir un ACV.
Licenciada en Letras por la Universidad de Buenos Aires (UBA), se destacó en el ámbito de la literatura y la cultura. Además, publicó varios libros de ensayos.
A partir de la recuperación democrática dio clases de literatura argentina en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA y, como profesora invitada, en varias universidades de Estados Unidos como Berkeley, Columbia, Minnesota, Maryland y Chicago.
Sarlo enseñó a leer literatura a generaciones de profesores, críticos y escritores, además de influir con sus ensayos y clases en la conformación del canon literario local.
Durante su extensa y prolífica carrera en el ámbito literario cosechó numerosas distinciones y premios como, entre otros, el Kónex de Platino y el Premio Pluma de Honor de la Academia Nacional de Periodismo de la Argentina.
Su trayectoria
Sarlo fue un emblema de la cultura argentina y una lúcida analista de coyuntura social y política. En marzo de este año, y entrevistada por Infobae, dio su visión sobre los primeros meses de gestión del gobierno libertario de Javier Milei. En ese momento, calificó al Presidente como un “político de naturaleza extremista”.
Colaboró en La Nación, Clarín, Perfil y las revistas Viva y Noticias. Algunas de sus columnas se publicaron en Tiempo presente. Notas sobre el cambio de una cultura.
Fue cofundadora en 1978 de la revista Punto de Vista, una publicación clave en la resistencia intelectual durante la última dictadura cívico-militar argentina (1976-1983).
A lo largo de su trayectoria, ha publicado libros esenciales como Una modernidad periférica (1988), Escenas de la vida posmoderna (1994) y La pasión y la excepción (2003), donde combina análisis literario, político y cultural. Su obra explora las tensiones entre tradición y modernidad, así como el lugar de la Argentina en un mundo globalizado.
Fue parte del consejo de redacción de la revista Los Libros, hasta su clausura en 1976. Desde 1978 hasta 2008 dirigió la revista de cultura y política Punto de Vista, un prestigioso ámbito de discusión y difusión intelectual. También trabajó en el Centro Editor de América Latina, con Boris Spivacow. Era cinéfila, melómana y aficionada al tenis: jugaba en el Club Ferro Carril Oeste, del barrio de Caballito, donde vivía. Colaboró en algunos guiones de películas de Filippelli, como No va más y Secuestro y muerte (sobre el asesinato de Pedro Eugenio Aramburu a manos de Montoneros, temática que abordó en La pasión y la excepción).
Sus primeros libros -Literatura y sociedad (1982) y Ensayos argentinos: de Sarmiento a la vanguardia (1983)- fueron escritos en coautoría con el sociólogo y ensayista Carlos Altamirano, que fue su pareja. También dieron a conocer Conceptos de sociología literaria. Ambos pusieron en circulación conceptos y teorías para comprender el peso de la literatura en la historia.
En 1985, publicó El imperio de los sentimientos: narraciones de circulación periódica en la Argentina, 1917-1927 (sobre los folletines y la literatura sentimental) y en 1988, Una modernidad periférica: Buenos Aires, 1920 y 1930, enfocada en los años de las vanguardias del siglo pasado. A este ciclo de ensayos lo completó La imaginación técnica: sueños modernos de la cultura argentina, de 1992. Su obra forma parte del catálogo de Siglo XXI en la Biblioteca Beatriz Sarlo, al cuidado de la profesora y escritora Sylvia Saítta. A comienzos de año, se lanzó Las dos torres. ¿Puede la cultura contemporánea pensar algo nuevo?
Su primer best seller fue Escenas de la vida posmoderna. Intelectuales, arte y videocultura en la Argentina, de 1994, que prosiguió con Instantáneas: Medios, ciudad y costumbres en el fin de siglo, de 1996. Resultado de sus conferencias sobre Jorge Luis Borges en la Universidad de Cambridge es el ensayo Borges, un escritor en las orillas, de 1993.
Le dedicó un ensayo al expresidente Néstor Kirchner: La audacia y el cálculo: Kirchner 2003-2010, de 2011. También a uno de los intelectuales que perfilaron su obra: el filósofo y crítico literario Walter Benjamin (Siete ensayos sobre Walter Benjamin); otro a la obra de su amigo, el escritor Juan José Saer (cuya literatura ella ayudó a encumbrar en el panorama literario local e internacional), Zona Saer, y otro al crítico literario francés Roland Barthes (Escritos sobre Roland Barthes). En Plan de operaciones. Sobre Borges, Benjamin, Barthes y Sontag, sumó a la intelectual estadounidense Susan Sontag con quien, en ciertos aspectos, se la podría comparar por sus intervenciones sobre estética, política, literatura y sociedad.
Por pedido del editor Alberto Díaz, publicó en 2014 el libro de crónicas Viajes: De la Amazonia a Malvinas.
Entre sus muchos reconocimientos están la beca Guggenheim, el Premio a la Trayectoria del Fondo Nacional de las Artes, el diploma al mérito Konex, la Orden do Mérito Cultural, grado Gran Cruz, de la República de Brasil, y la Pluma de Oro de la Academia Argentina de Periodismo.