El piloto Wilson Fittipaldi, hermano de Emerson, bicampeón mundial de Fórmula 1, falleció hoy en un hospital de San Pablo, luego de permanecer internado desde diciembre pasado, a causa de un accidente doméstico mientras almorzaba el día de Navidad.

El infortunado volante, de 80 años, resultó -además- el creador de la escudería Copersucar, un automóvil íntegramente armado en Brasil, que se dio el gusto de competir en la Fórmula 1 por casi cinco temporadas, a mediados de los '70.

Wilsinho, tal como se lo conoció, era hijo de un empresario y periodista que se encargó de organizar la actividad automovilística en el gigante de Sudamérica. Y con poco más de 20 años, el paulista se embarcó a la aventura de competir en Europa, mucho antes de que lo hiciera su famoso hermano, el más destacado en la familia.

Así, en 1966, el mayor de los hermanos Fittipaldi compitió en la Fórmula 3, en la que se mantuvo en forma discontinua hasta los albores de la década del '70. Tuvo como rivales en esa divisional y en la Fórmula 3 Británica a dos futuros campeones del mundo de F1, como Niki Lauda y James Hunt, entre otros.

Luego de una temporada en Fórmula 2, Wilson arribó a la máxima categoría automovilística internacional en 1972, al comando de un Brabham. En el equipo inglés estuvo dos años completos y obtuvo como mejor resultado un quinto puesto en el Gran Premio de Alemania, celebrado en 1973 en el tradicional autódromo de Nurburgring.

Fittipaldi volvió a la Fórmula 1 en 1975, pero ya no como piloto sino con equipo propio y al frente de la estructura Copersucar, con la que permaneció en la F1 hasta 1979.

La misión de conducir el auto se la delegó a su laureado hermano Emerson, quien consiguió como mejor ubicación un segundo puesto en el Gran Premio de Brasil 1978, detrás de Carlos Reutemann en el autódromo de Jacarepaguá

Wilson corrió un total de 35 Grandes Premios en la máxima categoría automovilística y su última competencia se dio en Watkins Glen, con el Gran Premio de Estados Unidos, en 1973.