La mayoría de los dirigentes del fútbol argentino realizaron hoy una reunión por videoconferencia para diseñar un plan de recorte salarial de los jugadores.
Estudiantes de La Plata dio el primer paso hacia el recorte de salarios de sus futbolistas. El presidente Juan Sebastián Verón ya habló con los referentes del plantel profesional para explicarles que es una medida necesaria e inevitable para poder afrontar el parate del fútbol argentino por la pandemia del coronavirus.
"Esta será la primera de varias reuniones, porque tenemos mucho que ver y ajustar, pero será difícil pagar los salarios de todos los empleados, incluyendo a los futbolistas", le reconoció un dirigente participante a Télam.
Además, la idea que prevaleció es la de cobrar los derechos televisivos y abonar los salarios del personal permanente de cada club y luego evaluar "qué queda" para pagarle a los jugadores.
A su vez, hay dirigentes que pidieron "priorizar" los contratos más bajos en los planteles y recién ahí buscar consenso con "quienes más ganan".
Por su parte, el sindicalista Sergio Marchi, Secretario General de Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA), se manifestó en contra de la potencial medida y advirtió que no "habrá que alimentar avivadas de los que hicieron mal sus presupuestos".
"Existen cerca de 4.000 contratos profesionales en todas las categorías del fútbol argentino, fútbol femenino y del Interior. Solo 960 son jugadores de primera división, pero después hay casi 30.000 trabajadores, entre árbitros, utileros y demás (sueldos), que deben cumplirse", apuntó Marchi en cada contacto con los medios.
Sin embargo, Javier Mascherano, de Estudiantes de La Plata, habló en el sitio oficial del club y comentó que "quizá muchas veces el futbolista es un blanco fácil, porque se suele hablar de sus posibilidades económicas. Y es como que moralmente el jugador está obligado a colaborar. Y está claro que en una situación como la actual, todos vamos a tener que colaborar".
De esta manera, el volante le abrió la puerta a la idea de los directivos, y también reconoció que los futbolistas son solidarios anónimamente.
"Lo que pasa es que muchos de nosotros no necesitamos estar comentando o diciendo en qué o donde hacemos colaboraciones. Me ha pasado de ayudar a diferentes entidades y no quise que se supiera nada. Eso debe salir del corazón, le debe servir a cada uno espiritualmente, y no hacerlo por el qué dirán", enfatizó.
Por su parte el presidente de Unión, de Santa Fe, Luis Spahn, contó que espera "un gesto solidario" de sus jugadores para poder "mantener al club en funcionamiento", durante una nota con Doble Amarilla, en consonancia con la idea casi generalizada de.la necesidad del recorte salarial a los futbolistas.