El pase del brasileño Neymar del Barcelona al PSG es un antes y un después en el mercado del fútbol mundial. Desde lo deportivo, el club de París se lleva a un jugador que está en el podio de los mejores del mundo, y de un club que está en el podio de los mejores del mundo. <b>Desde lo económico, el pase establece un nuevo techo para un mercado que goza de un crecimiento exponencial año tras año</b>.
En total, <b>el PSG tendrá que desembolsar unos 600 millones de euros para quedarse con Neymar: la cláusula de rescisión (222 millones), el sueldo del jugador (54.4 millones brutos al año), los impuestos y la prima de fichaje para el padre del jugador, Neymar Santos Sr.</b>
<b>La legalidad</b>
Pero, <b>¿es legal el traspaso de Neymar? ¿Cumple con los requisitos de la UEFA para mantenerse dentro de lo permitido por el fair play económico?</b> Según Andrea Traverso, responsable de la UEFA para el fair play económico, <b>"lo único que debe demostrar PSG es que no tienen pérdidas de más de 30 millones en un plazo de tres años"</b>.
En declaraciones para el diario ABC de Madrid, la dirigente amplía: "El impacto potencial del fichaje de Neymar por el PSG tendría efectos en la economía del club durante muchos años. <b>Es muy complicado juzgar este tipo de operación con antelación ya que no sabemos los planes del club francés</b>".
<b>Lo que ganaría el PSG</b>
Lo que se desprende de las declaraciones de Traverso es que PSG apenas debe encontrar la manera de mantener una relación armoniosa entre lo que gasta y lo que le ingresa, y así equilibrar su presupuesto. Las opciones para gambetear las normas para el PSG son muchas: apenas necesita incrementar sus ingresos para justificar los gastos. <b>Con la llegada de Neymar -apenas- aumentarían los ingresos comerciales del club en 100 millones de euros (unos 400 en total, es decir un 25 por ciento más que el último balance)</b>.
<b>El otro objetivo</b>
Pero además, el club de París tiene otras opciones, como vender jugadores. Es por eso que ya ubican al italiano Marco Verratti y a Ángel Di María como moneda de cambio.
Sin embargo, existe una trampa que es la que más seduce a <b>Nasser Al-Khelaifi, el director ejecutivo Oryx Qatar Sports Investments, el grupo empresario catarí dueño del PSG</b>. La idea sería que fuera Neymar el que desembolse el dinero de su cláusula, <b>que habría recibido de manos del mismo fondo de inversores dueño del club, a cambio de convertirse -además- en embajador del Mundial 2022. Eso haría que las cuentas del PSG solo se vieran afectadas por el futuro salario del futbolista y la prima de fichaje</b>. Una suma mucho más amigable a la hora de dibujar los balances anuales. Fuente: (Clarín).-