Antes de asistir a la gala del Balón de Oro de la FIFA en Zurich, Suiza, Jorge Sampaoli dio una entrevista en la que afirmó que "ya no quiero trabajar ni vivir más en Chile" porque "me siento un rehén". El rosarino fue nominado a la terna de "mejor entrenador del año", que finalmente ganó el español Luis Enrique.

Este martes regresó al país trasandino y se encontró un grupo de personas en el aeropuerto de Santiago que fue directamente a insultarlo e increparlo. Una situación absolutamente diferente a la que vivió apenas algunos meses atrás, cuando llevó a la selección chilena a conseguir el primer y único título de su historia: la Copa América 2015.

Los hinchas le reprocharon a Sampaoli su intención de dejar el seleccionado, situación que se podría confirmar en las próximas horas. El DT argentino se reunirá esta tarde con el presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), Arturo Salah, para definir su futuro.

El principal obstáculo entre Sampaoli y la ANFP es la cláusula de rescisión del contrato del entrenador, que es de unos 6.000.000 de dólares, un monto que el rosarino no quiere pagar y que la Federación no está dispuesta a olvidar.

Sampaoli está muy molesto con la Federación desde que se reveló que cobraba una parte de su sueldo en un paraíso fiscal cuando el presidente de la ANFP era Sergio Jadue, quien se entregó a la Justicia de EE.UU. después de confesar su implicación en el escándalo de sobornos en la Conmebol.