El piloto crespense, Joel Gassman, quien recientemente se alzó con la victoria en la última fecha del Turismo Nacional en Paraná, se sentó a dialogar con el programa "El Pelotazo" de <b>Elonce </b>para compartir detalles sobre su carrera y pasión por el automovilismo.

Gassman, que desde temprana edad mostró su pasión por el deporte, reveló cómo se adentró en el mundo del automovilismo: "Desde muy chico arranqué haciendo deporte, hice de todo, fútbol, básquet y tenis. De casualidad arranqué en el automovilismo, y desde que me subí no me bajé más".

El inicio de su carrera fue casi una casualidad, como relata: "Fue en unas vacaciones en Carlos Paz, cuando era chico que me subí a un karting de alquiler y le gané una carrera a mi viejo. A los 10 años me preguntó qué quería ser, yo le dije que quería ser remisero, y un día, de sorpresa, corrí y terminé tercero en Maria Grande".

Aunque su padre no es un entendido en automovilismo, Gassman reconoce su apoyo fundamental en el ámbito empresarial: "Mi viejo no entiende mucho de automovilismo, pero es bueno para los negocios, por eso firmamos un lindo equipo".

La victoria en Paraná significó mucho para Gassman, quien expresó: "Desde que gané la carrera no paro, estoy todo el tiempo mirando cosas. Era mi sueño ganar acá, hicimos todo. Está al nivel de salir campeón. Soy muy fanático del 'Guri' Martinez, lo esperaba todo el día afuera de su casilla solo para una foto o un autógrafo".

Sobre sus planes futuros, Gassman reflexionó: "Pensar en el TC es muy loco. Requiere mucho tiempo. Yo estoy a cargo de la empresa familiar y de vez en cuando me doy el gusto de subirme al auto".

El aspecto económico también es un desafío para el piloto: "Para poder correr yo alquilo el vehículo. Lo único que hago es juntar la plata para poner las calcomanías de las publicidades y me dan un monto por fin de semana, con el cual yo alquilo el auto. Llevo mi casco y no buzo, el día que no llegue a juntar el monto no corro".

Gassman destacó las particularidades del Turismo Nacional: "El Turismo Nacional es muy distinto en potencia, tamaño y aerodinámica al resto de categorías, entonces cualquiera puede ganar. Si yo dejo de correr un tiempo, voy a la siguiente carrera y puedo ganar".

La emoción y el riesgo son parte integral de su pasión: "El peligro y la adrenalina es lo que más me gusta. Lo que estamos arriba del auto puede que no seamos del todo normal. En cualquier momento puede pasar algo, y eso es lo que me llena".

A pesar de su amor por las carreras, Gassman es consciente de sus responsabilidades fuera de la pista: "No pienso en dedicarme solo a esto, mi viejo se esforzó toda la vida para el negocio y yo quiero mantenerlo de pie, hay muchas familias que dependen de la empresa".

Por último, el piloto hizo mención a la importancia de su padrino en su vida: "Mi padrino fue muy importante, lo extraño mucho. Juan Carlos se llamaba. Espero todos los días que entre por la puerta, mucho de lo que vivo hoy es gracias a él".

Con una carrera llena de desafíos y logros, Joel Gassman sigue dejando su huella en el mundo del automovilismo nacional, demostrando que la pasión y el esfuerzo son clave para alcanzar el éxito en cada curva de la vida.

(Elonce)