Cuando se desató un diluvio torrencial en Alta Córdoba, apareció Mariano Guerreiro, que entró en reemplazo de Pablo Magnín en el primer tiempo, para meter un cabezazo demoledor y darle un triunfo importantísimo a Instituto sobre un rival directo en la pelea, Atlético Tucumán, que terminó con uno menos por la expulsión de Leandro Díaz.

Los cordobeses tienen ahora 39 unidades y alcanzan momentáneamente a Los Andes en la sexta posición, dos menos que Juventud Unida de Gualeguaychú que es último equipo que jugaría en este momento por el segundo ascenso. El decano tucumano se mantiene por ahora en la segunda colocación, con 49 puntos.

En la gris y lluviosa tarde de hoy en Alta Córdoba, cordobeses y tucumanos jugaron un discreto primer tiempo, sin llegadas de peligro en ninguno de los dos arcos, mientras que lo mejor llegó en los últimos 20 minutos del complemento tras la expulsión del delantero visitante Leandro Díaz.

Ahí fue con todo el dueño de casa, aunque no encontraba los espacios para entrarle a la última línea de los de Juan Manuel Azconzábal, que no se achicaban y tuvieron sus chances con dos tiros libres de Luis Rodríguez, siendo el último de estos a los 31 minutos el más peligroso, ya que la pelota se fue rozando el travesaño del arco defendido por Lucas Hoyos.

El ingreso del debutante Gonzalo Maroni (16 años) le dio a Instituto ese cambio de ritmo necesario para romper la defensa rival, y en ese desorden en el que entró el fondo tucumano, fue Cristian Bernardi quien subió por izquierda y envió un centro preciso para la cabeza de Guerreiro, quien se elevó sin marca y de cabeza venció la resistencia de Cristian Luchetti decretando el 1 a 0, que sería definitivo.

Tres chances para igualar dispuso Atlético, primero, a los 45 minutos, apareció Bruno Bianchi por izquierda pero no pudo convertir cuando tenía muy poco ángulo, luego tuvo otra clara en los pies de Menéndez, quien remató de larga distancia y la pelota dio en el travesaño y ya con dos minutos de tiempo adicionados se lució Hoyos en la última tras un cabezazo de la 'Pulga' Rodríguez.