Independiente dejó escapar una victoria que parecía segura al empatar 1-1 con Godoy Cruz en el Estadio Libertadores de América, por la jornada 19 de la Liga Profesional. El Rojo, que había abierto el marcador con un gol de Felipe Loyola, vio cómo el Tomba igualó en el último suspiro, lo que dejó al equipo con un sabor amargo tras haber estado cerca de sumar tres puntos vitales.
El partido comenzó con un desarrollo parejo, donde la falta de claridad y precisión en ambas escuadras marcó el ritmo del primer tiempo. Fue recién a los 33 minutos cuando Independiente pudo generar su primera oportunidad clara. Un centro de Federico Mancuello fue conectado por Gabriel Ávalos, quien forzó una buena intervención del arquero mendocino, Franco Petroli. Esta jugada despertó al conjunto visitante, que poco después estuvo cerca de abrir el marcador con un remate de Elías Pereyra que se estrelló en el palo.
La segunda mitad trajo consigo un Independiente más decidido. El equipo dirigido por Julio Vaccari logró el ansiado gol a los 55 minutos, cuando Felipe Loyola convirtió de cabeza tras una jugada de pelota parada, un sello característico del entrenador. La celebración desató la euforia en las gradas, ya que el Rojo había mostrado mejoría y parecía en control del partido.
Sin embargo, cuando el tiempo se agotaba y el triunfo parecía asegurado, Godoy Cruz encontró la igualdad. A falta de cinco minutos para el final, Salomón Rodríguez, tras un tiro libre, remató de cabeza y, con la complicidad de Rodrigo Rey, logró desbaratar las ilusiones de un triunfo local. Este gol fue un duro golpe para Independiente, que se fue del partido sintiendo que había dejado escapar dos puntos cruciales en su lucha por clasificar a la Copa Libertadores.
Con este empate, Independiente se mantiene en puestos de Sudamericana, pero el resultado no hace más que alimentar la incertidumbre y la presión en el club, que aún lidia con conflictos extradeportivos y busca afianzarse en el camino hacia la clasificación.