Seguramente Guido Pella lamentará durante unos días esta despedida. Acaso porque estuvo muy cerca de llegar a la tercera rueda de Roland Garros; apenas un par de puntos lo separaron de alcanzar un triunfo enorme. Pero, en la cancha 1, el zurdo de Bahía Blanca le dijo adiós al segundo Grand Slam de la temporada con una caída por 4-6, 1-6, 7-5, 7-6 (7-4) y 6-4 frente al local Gilles Simon, en 4 horas y 32 minutos de batalla sobre el polvo de ladrillo parisino.
Más allá de enfrentar de igual a igual al número 18 del mundo en su casa, Pella (48°) dejará París con la certeza de que el triunfo estuvo al alcance de su mano. No faltaron chances. Estuvo al frente 6-4, 6-1 y 4-2; en el cuarto set también estuvo 4-2 y 0-30 con el saque del francés; la última oportunidad la tuvo con su saque: 6-5 y 30-15. Pero tres errores no forzados le cerraron la puerta, y Simon encontró el resquicio para dar vuelta el partido, en una cancha 1 convertida en un volcán, con todo el apoyo para Gillou (pronúnciese Guilú), el sobrenombre de Simon; en una jornada de sol, la primera tras varios días de mal clima, miles de espectadores colmaron uno de los escenarios más emblemáticos de Roland Garros y colaboraron en la remontada épica de Simon.
"El tenis es así, a veces es injusto porque uno intenta ganar por todos los medios y por dos puntos no puede, y ese fue el caso hoy. Me enfrenté a un especialista que jugaba su mejor tenis cuando estaba contra las cuerdas. Me puse tenso para cerrar; la gente que lo alentó también jugó un papel importante", consideró el bahiense.
"Uno puede tener las chances, y yo las tuve, pero hay que cerrarlo. Y él jugó muy bien esos games, yo sentí un poco la presión y él está acostumbrado a jugar batallas en canchas importantes. Creo que lo di todo y no tengo nada para reprocharme. Ahora estoy bajoneado, pero sé que esto también me servirá para el futuro. Siento que estoy jugando de igual a igual con todos los buenos jugadores, pero me da bronca perder porque no vine a hacer un buen papel, vine a ganar. Si hay algo que me falta es experiencia en momentos complicados, como la que tiene él", amplió Pella, que tras la derrota se abrazó con Simon en la red; el argentino se fue ovacionado.
Pella, que venía de eliminar en la primera rueda a su compatriota Diego Schwartzman (que siguió el partido de su amigo desde la primera fila), estuvo lejos de rendirse y dio batalla hasta el final. Tras quedar 4-5 en el quinto set, el argentino salvó seis match-points, y también contó con tres puntos de quiebre para emparejar el resultado, pero no los pudo convertir, y en definitiva, Simon se quedó con el pase a la tercera rueda, en la que se enfrentará con el serbio Viktor Troicki.