La Selección de España ha completado su segundo entrenamiento en La Ciudad del Fútbol. Las aguas se han calmado, ya que no hubo presencia de aficionados, quienes el lunes habían insultado duramente a Gerard Piqué. Sin embargo, puertas adentro, el entrenador Julen Lopetegui intenta enderezar su nave en momentos turbulentos. La tensión no cesa y el defensor del Barsa podría dejar la concentración.
A pocos días del partido ante Albania, donde La Roja podría sellar su clasificación al Mundial 2018, los medios españoles hablan de "situación insostenible" e informaron que el zaguero catalán podría abandonar definitivamente el equipo. El conflicto pone en riesgo la chance de la selección española de conseguir el pasaje a la Copa del Mundo este viernes.
Un artículo del periódico MARCA escrito por Roberto Gómez sostiene que "por el bien de la selección española (y, sobre todo, para que lo importante sea el fútbol y no los posicionamientos de Gerard Piqué) Julen Lopetegui debe liberarlo."
Por su parte, en el diario AS informan que "la actitud de Piqué y sus declaraciones han terminado por provocar un ambiente irrespirable" y destacan que su vínculo con Sergio Ramos, capitán del Real Madrid, ya está totalmente roto: "La relación entre Piqué y Sergio Ramos se ha quebrado definitivamente. La reunión de este lunes fue muy tensa para el catalán, 'que ya veremos si resiste la presión y no abandona la concentración' (?) Ramos ya le avisó la semana pasada que con sus tuits no ayudaba a apaciguar el ambiente y Piqué no sólo no ha hecho caso, sino que ha ido a más."
Las puertas abiertas de la primera sesión de España provocaron el rechazo unánime de todos los aficionados a Piqué. El central catalán debió entrenarse entre cánticos en su contra y una lluvia de insultos. Son hora decisivas, la continuidad del futbolista de Barsa en la selección pende de un hilo tras expresarse abiertamente en contra del gobierno español.