El futuro de Marcelo Barovero parece estar afuera de River. Pese a que los hinchas se ilusionaban con que el arquero cambie de postura, el propio Marcelo Gallardo confirmó su salida: "Es muy difícil que haya vuelta atrás con Barovero, va a ser una despedida triste".

En diálogo con Fox Sports Radio, el entrenador de River habló de lo que generará la partida de Trapito: "Lamentablemente sé que va a ocurrir, como ya pasó con otros jugadores. Es uno de los jugadores más importante que tuvimos, en los últimos tiempos del club. Cada uno que se fue de este plantel nos ha dado todo. Va a ser duro, pero ya sabemos que va a ser así. Yo me tengo que ocupar, más que preocuparme".

A propósito de esto, el Muñeco habló de las otras salidas como Ramiro Funes Mori, Kranevitter, Carlos Sánchez, Teo, entre otros, y aseguró que "no eran irremplazables. Hubo trabajo". Respecto al flojo rendimiento del equipo, agregó: "Algunos tienen otros tiempos diferentes. Acá se pide resultados de manera urgente y se entiende. El hincha lo que quiere es ganar y más en River, cómo no lo voy a entender. Pero todo lleva un proceso".

Marcelo Gallardo también habló de la falta de resultados y negó que por los títulos obtenidos no tenga tanta presión: "Esto es día a día. El hincha quiere ganar siempre. A mí también me gusta ganar y el día que no pueda sacar resultados me voy yo solo. Lo que se ganó fue importante y va a quedar en la historia, y el hincha lo va a reconocer siempre, pero el domingo quiero ganar. El día que no lo pueda hacer me iré".

Puntualmente de la condición física de Andrés D'Alessandro, dijo: "No tuvo la posibilidad de jugar tres o cuatro partidos seguidos. Esperemos que pueda tener esa continuidad que necesita un futbolista que viene de otro campeonato diferente. Es un jugador de mucha personalidad que no va a sentir la presión, la asume y se hace responsable. El tema que pueda encontrarse rápidamente con su juego, que nos dé el salto de calidad".

Para terminar, habló del saludo con Guillermo Barros Schelotto en el último Superclásico y aunque negó tener "mala onda", confesó que hay una rivalidad marcada: "No tengo problemas con Guillermo, por qué voy a tener mala onda. Me lo crucé en diferentes lugares del mundo, dentro y fuera de la cancha y nos hemos saludad con respeto. Siempre hemos sido rivales y lo vamos a seguir siendo, el único problema es que son dos contra uno".