Era falso que un torneo de 30 equipos iba a cortar con la histeria y el nerviosismo con que se jugaban antes los campeonatos cortos en la Argentina. Si una de las ideas era darle un marco de tranquilidad a los equipos, y especialmente a los técnicos para trabajar, el fracaso es rotundo: en 27 fechas se fueron 28 entrenadores y solo 9 de los 30 equipos mantiene el mismo DT desde la primera fecha.
Los malos resultados, el mal humor de la gente, y a veces la falta de química con los futbolistas generó despidos y renuncias: ¡28! Una locura insostenible si se quiere mejorar un fútbol argentino cada vez más deprimido como juego y espectáculo.
Hay tres clubes que son el punto máximo de esta histeria de técnicos que van y vienen porque tuvieron cuatro entrenadores en 27 fechas: Sarmiento (Schurrer, Pirez, Burruchaga y Quiroz), Huracán (Dominguez, Caruso Lombardi, Apuzzo y Azconzábal) y Unión (Madelón, Pumpido, Magnin y Marini), publicó <i>TN</i>.
Solo Talleres, San Lorenzo, River, Boca, Esudiantes, Rafaela, Lanús, Patronato y Banfield mantuvieron DT desde la fecha 1 a la 27. Newell´s no había cambiado de entrenador, pero después de la derrota en Santa Fe del último sábado renunció Diego Osella y tendrá un interinato hasta el final del campeonato.
El caso más increíble fue el de Claudio Ubeda en Racing que se fue después del primer partido. ¡Una sola fecha! Eduardo Domínguez y Cristian Bassedas dejaron sus cargos en Huracán y Vélez en la cuarta fecha.
Otras situaciones insólitas fueron las de Jorge Burruchaga y Lucas Bernardi, que asumieron en Sarmiento y Arsenal en la fecha 10 y se fue en la 14. Apenas cinco partidos.
Además, son varios los DT que dirigieron a más de un equipo durante estas 27 fechas: Domínguez (Huracán y Colón), Bernardi (Arsenal y Godoy Cruz), Quiróz (Aldosivi y Sarmiento), Madelón (Unión y Belgrano), Montero (Colón y Central), Caruso Lombardi (Huracán y mañana asume en Tigre), Holan (Defensa y Justicia e Independiente), Lavallén (San Martin y Atlético Tucumán), Méndez (Godoy Cruz y Belgrano), Díaz (Olimpo y Quilmes).
Es claro que si el fútbol argentino no cambia en este aspecto de manera urgente difícilmente pueda mejorar el nivel de juego porque todo está atado al resultado del próximo domingo. Muy pocos apuestan de verdad, no hay proyectos, y son cada vez menos los dirigentes que se la juegan por un DT que ellos eligieron cuando los resultados son malos.
Todavía quedan cuatro fechas para el final del campeonato "como DTs", y no sería extraño que alguno más salte por el aire. Y cuando termine el torneo se vienen varias salidas y nuevas búsquedas. Porque nada ha cambiado. Todo sigue igual, con 19 o con 30 fechas. Fuente: (TN).-