La noche de "Gran Hermano 2015", el reality que emite América, comenzó con tres nominados: Mariano, Belén y Florencia. En primera instancia, el resultado de la votación telefónica indicó que Mariano sigue en carrera. Enfrentadas así, mano a mano, las dos chicas, Florencia tuvo que abandonar la casa, conforme al 53,8 por ciento de los votos del público. Ya en el estudio, Flor no se resistió al pedido de la tribuna de que le diera un pico a Fernando, un participante que había sido eliminado con anterioridad.

"La pasé bárbaro acá, pero hay momentos en los que te sentís mal y decís: no quiero que me vean", le dijo Belén a Jorge Rial en la charla previa al anuncio de los resultados de la gala de eliminación. "¿Tenés miedo de irte de la casa?", le preguntó entonces el conductor. "En la semana estuve nerviosa y pasé una noche en la que no podía dormir. Me daban vuelta en la cabeza varias cosas que había hablado con mis compañeros".

Por su parte, Florencia dijo: "Entré en el peor momento de la casa. Ojalá hubiera vivido momentos más alegres. Es difícil estar aquí adentro cuando uno no está desde el primer día. Son todos buenos, están todos jugando y cada uno juega a su manera. Tal vez, mi problema es no poder jugar. Y por eso me afectan tanto las cosas. Es muy difícil estar aquí adentro". Florencia preguntó, además, si Fernando -un participante que ya fue eliminado- está de novio. Cuando Rial le confirmó que no, ella admitió que gusta de él y que quiere que la esté esperando fuera de la casa.

La gala empezó con el planteo de Jorge Rial de que en la casa hay dos grupos que no se hablan entre sí y que las pocas veces que se hablan es para herirse. Un informe ilustró las peleas originadas en la necesidad de limpiar la casa y la mala disposición de los participantes a hacerlo. "La casa más dividida que nunca. Una broma desató la guerra", resumió el videograph y en ese marco se emitieron escenas de las múltiples "maldades" que se hicieron los unos a los otros y la andanada de reproches e insultos que intercambiaron. Entre otras cosas, Marian escupiéndole la almohada a un compañero. "Marian siempre es así, escatológica", comentó Rial tras las imágenes de las escupidas.

El conductor se conectó con los participantes donde Mariano lo recibió disfrazado de pastor brasileño ("hago esto para ponerle buena onda a la casa", explicó más tarde), Marian se quejó de que Francisco le hubiera roto un huevo en la cabeza y Camila se indignó por todo lo que la molesta Francisco, quien aseguró que lo que de verdad ocurre es que "ella está enamorada de mí desde el principio".

Jorge Rial leyó luego un comunicado de Gran Hermano donde se anunciaron sanciones para dos participantes: Francisco y Marian. A él lo sancionaron "por haber tirado un zapato de Marian a la casa de al lado". Y a ella, "por haber escudipido la almohada de un compañero, la de Francisco". Esas respectivas tarjetas amarillas implican que en el caso de que alguno de ellos llegue a la final, se le descontarán 20.000 pesos del premio del realiti. Si reiteran este tipo de comportamientos, según explicó el conductor, Gran Hermano puede seguir sancionándolos con este mismo criterio o expulsarlos directamente.

Sobre las 22 tuvo lugar el primer cierre de votación y el público, con el 26,6 por ciento de los sufragios, decidió que Mariano siguiera en carrera. Así, Florencia y Belén quedaron enfrentadas mano a mano en la votación telefónica.

Por otra parte, comunicado de Gran Hermano mediante, Rial les anunció a los participantes las nuevas reglas sobre la nominación fulminante. "Ya no aplicará el porcentaje mínimo en la votación para ser expulsado. El nominado va a quedar en las mismas condiciones que los demás participantes para ser expulsado", leyó. Antes, quien recibía la fulminante, para ser expulsado necesitaba el 60 por ciento de los votos del público. La fulminante, según lo expuesto, recién se va a poder usar hoy a partir de las 17.30, de modo tal que sólo el que se presente en el confesionario justo a las 17.30 podrá fulminar a un compañero. "Ahora, la fulminante es un arma, no una protección", indicó Rial.

Gran Hermano convocó a Mariano al cuarto rojo y le pidió que eligiera a un compañero, aclarándole que no podía ser ninguno de los nominados. Eligió a Marian. Cuando abrieron el sobre con la "sorpresa" se enteraron de que ambos deben permanecer tres días unidos por las muñecas con una soga con velcro.

Después, con los ex participantes de "Gran Hermano 2015", Jorge Rial debatió acerca de lo que denominó "La grieta en la casa" para referirse a la pelea que los enfrenta, ya no por cuestiones políticas, sino por asuntos de la convivencia y el juego.