El suizo Roger Federer dedicó gran parte de su discurso tras su victoria en Wimbledon al croata Marin Cilic, al que dijo en la entrega de trofeos que "jugar con una lesión es muy cruel" y que es "un héroe".
"Te quiero dar la enhorabuena porque hiciste un torneo buenísimo, deberías estar muy orgulloso", comentó el ocho veces ganador en el All England Club, "lo has hecho lo mejor que has podido y puedes estar orgulloso de ti mismo, y espero que podamos jugar mejores partidos"
Federer bromeó después con los seis meses de descanso que se ha tomado este año. "Me tendré que tomar más veces un descanso de seis meses", dijo, y añadió: "Mejor que ganar el trofeo es sentirme sano. Eso significa mucho para mí. Trabajé muy duro para estar aquí".
"Es mágico, no me puedo creer que no haya cedido un solo set", señaló el suizo sobre su gesta en estas dos semanas.
"Siempre creí que podría hacerlo, porque si crees mucho en algo puedes conseguirlo. Seguí creyendo y soñando. Es una pista muy especial, muchas leyendas han jugado aquí. Espero que no sea mi último partido y pueda volver aquí el año que viene a defender el título", finalizó.