La histórica Farmacia Moyano de Paraná celebró con orgullo 100 años desde su fundación. Un 24 de noviembre de 1924, la farmacia abrió por primera vez sus puertas, comenzando un legado de servicio a la comunidad que perdura hasta el día de hoy. Reconocida especialmente por su formulación de medicamentos magistrales y la calidez con la que atiende a cada paciente, es un referente de confianza y profesionalismo en la ciudad, cumpliendo 100 años al servicio de la salud y el bienestar de los paranaenses.
En diálogo con Elonce, Perla González de Falcón, una de las actuales propietarias de la farmacia, quien recordó con emoción los inicios de la histórica farmacia y destacó el compromiso de su familia con los principios que guían su labor. Perla, quien adquirió la farmacia junto a su familia en 1958, aseguró que, aunque el tiempo ha pasado, la farmacia sigue fiel a la visión con la que fue fundada: “Siempre apostamos a pensar en el medicamento como un bien social, estamos alejados de lo comercial”, explicó.
De la farmacia original a la sede actual
En sus primeros años, la Farmacia Moyano no estaba ubicada donde se encuentra hoy. “La farmacia original estaba en la vereda de enfrente, sobre 25 de Mayo, que era una calle de una sola mano y muy angosta. Era otro contexto”, relató Perla, quien agregó que con el paso de los años y el crecimiento de la ciudad, la farmacia se trasladó al actual emplazamiento de 25 de Mayo 161, donde sigue siendo un referente en la comunidad.
Según expresó Perla, desde los inicio la “receta" de la Farmacia Moyano fue siempre la misma: estar al servicio permanente de la población, escuchando a los pacientes y brindándoles soluciones efectivas. “La gente necesita mucho del asesoramiento del farmacéutico, y nosotros tratamos de cumplir esa función de la mejor manera. Somos un equipo de cuatro farmacéuticos, todos muy estudiosos, y estamos comprometidos con el aprendizaje continuo”, destacó Perla.
Formulaciones magistrales
Uno de los pilares que distingue a la farmacia es la formulación de medicamentos magistrales, un servicio especializado quese transfirmó en un sello indiscutible de la farmcia. “Recibimos a diario pacientes que requieren formulaciones especiales, muchas veces derivados de tratamientos en hospitales de Buenos Aires. En esos casos, somos nosotros los que realizamos esas fórmulas, lo que nos motivó a ofrecer cursos especializados para otros farmacéuticos”, explicó Perla, refiriéndose a los cursos de formulaciones magistrales que la farmacia comenzó a brindar en el Coelgio de Farmaceutico para capacitar a profesionales de toda la provincia.
Este esfuerzo educativo no pasó desapercibido, y el programa pasó a la Universidad Nacional de Rosario (UNR), donde se creó una diplomatura para farmacéuticos especialistas en formulaciones magistrales. “Este fue un gran logro, no solo para la farmacia, sino también para la comunidad de profesionales. Es un aporte que le devuelvo a mi facultad y a las futuras generaciones”, expresó con orgullo.
Para Perla, la farmacia es mucho más que un negocio: es una vocación de servicio. “Desde hace 100 años, esta farmacia es un lugar al que la comunidad puede acudir con confianza, los 365 días del año. Siempre estamos disponibles para el paciente, para escucharlo, asesorarlo y darle respuestas. Creemos que la farmacia es el primer lugar al que una persona acude cuando se siente mal, y desde ahí, comienza su camino hacia la salud”, señaló.
A lo largo de su carrera, Perla fue testigo de cómo la farmacia ha evolucionado y se ha adaptado a los nuevos tiempos. “Vivimos estudiando, porque el farmacéutico no solo tiene que dispensar lo que el médico receta, sino que también debe explicar al paciente qué está tomando, qué efectos puede tener. A quienes no saben leer o escribir, les hacemos dibujos para que comprendan”, explicó.
En un mensaje claro sobre su postura profesional, Perla enfatizó que lo más importante no es el lucro, sino el impacto social que tiene el medicamento en la vida de las personas. “Lo que hacemos, lo hacemos con amor. El medicamento es un bien social, y ese es el enfoque con el que trabajamos desde hace tantos años”, afirmó.
Finalmente, Perla recordó a los fundadores de la farmacia, quienes hace 100 años tuvieron la visión de que la preparación farmacéutica trascendería generaciones. “Ellos sabían que este arte, que este oficio, iba a seguir proyectándose y llegaría hasta nuestros días. Hoy, estamos aquí, celebrando un legado que sigue vivo, y que tiene la misma misión: cuidar a la comunidad”.