Paris Saint Germain necesitaba cambiar la cara ante Lille por la fecha 24 de la Ligue 1 después de tres derrotas consecutivas, algo que no sufría desde 2011, y el primero que lo hizo fue Lionel Messi.
El crack rosarino apareció en la previa del encuentro en París con un look renovado, afeitado y sin la barba de los últimos años.
El look de La Pulga recordó a viejas épocas en el Fútbol Club Barcelona, donde ya había optado por dejarse la barba en su etapa final. La última vez que Leo se había mostrado afeitado al ras, data del año 2016, precisamente, militando en el club catalán.
Ese mismo año el astro argentino decidió cambiar drásticamente, teñirse el cabello de rubio y dejarse crecer el vello facial, que luego fue variando en cuanto a cantidad y forma.