La FIFA busca de urgencia un país para organizar el Mundial Sub 17 tras quitarle este fin de semana la sede a Perú por supuestamente no garantizar la exoneración de impuestos para las delegaciones participantes.
El torneo debe disputarse del 5 al 27 de octubre con 24 selecciones, entre las que ya están clasificadas Australia, Corea del Sur, Japón, Nueva Zelanda y Tayikistán.
Con Perú despojado de la sede del torneo, la FIFA quiere aparentemente mantener el torneo en Sudamérica, por lo que la solución de urgencia que ha pensado es Brasil, que este mismo año también organizará en junio la Copa América, según informaron medios brasileños.
El nombre de Chile también fue puesto encima de la mesa por la propia Federación Peruana de Fútbol (FPF) cuando en septiembre se especulaba con la posibilidad de que Perú perdiese la sede ante la amenaza de la FIFA de suspenderlo si derogaba una ley que le daba a esta autonomía sobre la legislación nacional.
Descartado parece estar Ruanda, el otro país junto a Perú que mostró intenciones de albergar el torneo, pero dio marcha atrás al no poder garantizar todas las condiciones exigidas por la FIFA, lo que dejó a la peruana como única candidatura para acoger la competición.
Perú recibió en marzo de 2018 la misión de organizar el Mundial Sub 17, solicitado por la FPF desde el fulgor de la histórica clasificación de la selección peruana para disputar la Copa del Mundo de Rusia 2018.
Ahora perdió la sede por razones contradictorias, pues la FIFA ha sido ambigua al brindar los motivos por los que dejó al país sin el evento.
Mientras en un comunicado oficial alegó "asuntos relativos a la organización y la infraestructura que afectan a la adecuada realización del torneo", a la FPF le indicó que se debe a la inseguridad sobre si las delegaciones estarán exoneradas de impuestos durante el torneo.
El ministro peruano de Educación, Daniel Alfaro, cuya cartera maneja también el Instituto Peruano del Deporte (IPD), corroboró en medios locales que la razón principal fue el tratamiento de impuestos, uno de los ocho requisitos exigidos por la FIFA al país anfitrión.
Alfaro explicó que el Ejecutivo peruano había cumplido con los otros siete puntos y que la exoneración de impuestos estaba en trámite con un proyecto de ley que iba a ser presentado al Congreso para su correspondiente aprobación.
En total serán 186 millones de soles (unos 56 millones de dólares) que las autoridades peruanas dejarán de invertir en el torneo y en los estadios donde el campeonato se iba a disputar.
Perú ya tenía definidos casi todos los seis estadios del torneo, entre ellos el Nacional, de Lima; el Mansiche, de Trujillo; el Miguel Grau, de Piura, y el Jorge Basadre, de Tacna.
Todos ellos están casi a nivel del mar, pues la FIFA quiso evitar ciudades situadas en altitud como Cusco o Arequipa, según señaló la pasada semana el jefe de Desarrollo de la FPF, Guillermo Echevarría.
Así fue como Perú se quedó sin organizar el segundo Mundial Sub 17 de su historia, tras haberlo acogido en 2005 cuando México salió campeón, aunque sus autoridades deportivas han manifestado su intención de acoger otro torneo de las mismas características en los próximos años.
Por lo pronto, han asegurado que el Sudamericano Sub 17 de marzo próximo, que será clasificatorio para el Mundial, sí se disputará en Lima, con el estadio de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos como escenario único