"Cómo no te voy a querer", "We are the champions" y el himno histórico de la institución fueron las melodías que endulzaron los oídos de los miles de hinchas del Real Madrid que salieron a las calles de la ciudad para festejar la conquista de la Undécima, en Milán y por penales ante el Atlético de Diego Simeone.
Una multitud de Merengues se congregó en la Cibeles, uno de los puntos emblemáticos de la capital española, para recibir con todos los honores a los flamantes campeones del Viejo Continente. Poco importó que fueran las 7:30 y varios de los simpatizantes pasaron la noche en el lugar a la espera del arribo de sus héroes.
En un micro descapotable con la leyenda "Campeo11es", los protagonistas del elenco de Zinedine Zidane vistieron remeras alusivas al título tan esperado en las últimas semanas y se envolvieron en banderas de su país de origen. Mientras tanto, el capitán Sergio Ramos fue el encargado de cubrir a la escultura de la fuente con una insignia del Madrid y ofrecer el trofeo ante el delirio de una auténtica multitud.
Fueron casi veinte minutos de júbilo extremo compartido entre los fanáticos de la Casa Blanca y los futbolistas, quienes grabaron cada momento y compartieron sus sensaciones en las redes sociales. Posteriormente, los campeones se subieron de nuevo al automóvil y emprendieron el regreso al Santiago Bernabéu, donde finalizó la fiesta.