El partido que Arsenal y Olimpo empataban sin goles fue suspendido antes del arranque del segundo tiempo por el árbitro Héctor Paletta. Las fuertes lluvias provocaron que la pelota rodara con demasiadas dificultades en el campo de juego.
Ya sobre el cierre de la etapa inicial, el agua que caía generaba inconvenientes para el normal desarrollo del encuentro. El juez continuó las acciones hasta el final del primer capítulo, a la espera del cese de los chaparrones y del posterior drenaje del césped del estadio en Sarandí.
De todas formas, las precipitaciones continuaron durante el entretiempo y las condiciones de la cancha empeoraron notablemente. Es por eso que la AFA deberá reprogramar los 45 minutos que le faltan a este duelo clave por la permanencia en la máxima categoría del fútbol argentino.