Dos nuevos episodios de la delincuencia de las barras se dieron este fin de semana y ambos hechos tuvieron dispares reacciones. Por un lado, frente a las amenazas y el robo sufrido en la casa del vicepresidente 2º de Rosario Central, Ricardo Carloni, remarcó que no piensa "dejar de ser dirigente".
En tanto, los "hinchas" de Temperley presionan hace una par de semanas a los dirigentes del club "Gasolero" y el presidente de la institución deportiva, se mostró con desgano ante la prensa. "No sé si tiene sentido que siga en el cargo", admitió.
<b>Pedido de los barras</b>
El presidente de Temperley, Hernán Lewin, reveló hoy que puede dar un paso al costado después de que la barrabrava de la institución le solicitara algo que "no estamos dispuestos a darle".
Durante el partido frente a Independiente, algunos miembros de la hinchada del "Celeste" se treparon al alambrado durante el primer tiempo y obligaron a que el árbitro Darío Herrera detuviera por unos minutos el encuentro.
En ese sentido, explicó en declaraciones formuladas a TyC Sports: "No estamos dispuestos a acceder a los pedidos de unos violentos que se suben a un alambrado porque no les dan lo que quieren".
Si bien no quiso profundizar sobre ese pedido, NA averiguó que los barras le solicitaron un número fijo de entradas por partido, un dinero por mes y el manejo del buffet de la institución.
"Esta semana tendré una serie de reuniones y definiremos la situación. Prefiero dar un paso al costado, no me gusta vivir un partido como el otro día, con diez hinchas insultándome detrás de un alambrado. Mi decisión es no quedarme a pelear, no soy como (Javier, el expresidente de Independiente) Cantero que se quedó a pelearla".
Lewin remarcó que la comisión directiva que él encabeza "logró tener un club ordenado, llevarlo a Primera División y no deberle un peso a nadie".
"No estoy preparado para ésto, tengo una vida y una familia. No me encuentro dispuesto a convivir con la barra. Sé que el próximo partido de local, ante Olimpo, seguro haya nuevos incidentes", graficó.
Con respecto al partido de la próxima fecha, ante Boca en la Bombonera, se mostró optimista de "poder dar el batacazo ante un duro equipo y en su propio estadio".
<b>Robo y amenazas durante el clásico</b>
El vicepresidente de Rosario Central Ricardo Carloni dio detalles hoy del robo que sufrió
mientras se jugaba el clásico de la ciudad y negó que este hecho de inseguridad le haga replantear su rol como dirigente.
Durante el partido que ganó Newell´s 1 a 0 dos desconocidos ingresaron a su hogar para "robarse unas pocas cosas y dejar todo revuelto", según explicó.
"No sé si son barras o no. No puedo hacer tal afirmación porque debo ser responsable en cada comentario, sabemos cómo se vive el fútbol en esta ciudad. El hecho está en plena etapa de
investigación, dejaron muchos destrozos y algunas pintadas", expresó.
Carloni indicó que "seguro eran hinchas de Newell´s y reconocieron de quien era la casa o simplemente notaron que la familia era de Central por diversas cosas que teníamos".
"Hay que seguir trabajando y tratar de darle racionalidad a la pasión. Rosario es una ciudad muy futbolera, donde sale a la calle y sólo ves hinchas de Central o Newell´s, está todo muy concentrado", contó.
Consultado sobre si pensaba tomar alguna decisión después del hecho, fue claro: "No pienso dejar mi actividad como dirigente ni mudarme, aunque todo el mundo sabe dónde vivo".