Fuentes jurídicas informaron a la agencia EFE de este acuerdo, que implica que el jugador portugués, que desde la próxima temporada residirá en Italia (firmó con Juventus), no entrará en prisión a cambio de declararse culpable de cuatro delitos fiscales.
El acuerdo alcanzado entre las acusaciones y la defensa del futbolista estaba pendiente del visto bueno de Hacienda, que fue el organismo que denunció a Ronaldo y cuyos responsables cambiaron recientemente como consecuencia del relevo en el Gobierno central.
Las acusaciones imputaban a Cristiano Ronaldo cuatro delitos contra la Hacienda Pública cometidos entre 2011 y 2014 y que suponen un fraude tributario de 14.768.897 euros. Las cuotas supuestamente defraudadas son de 1,39 millones en 2011, 1,66 en 2012, 3,20 en 2013 y de 8,5 en 2014.
El acuerdo final por la vía penal rebaja ese importe defraudado a 5,7 millones de euros, pero el importe total que deberá pagar sumando la multa y los intereses llega casi a los 19 millones. También pagará las costas de la Abogacía del Estado en el proceso.
Entre Hacienda y la Fiscalía existe aún una discrepancia de criterio respecto a la sustitución de la condena penal por una multa, ya que la Agencia Tributaria rechaza ese cambio, es decir, desea la condena a dos años de prisión, de modo que, aunque no entre a la cárcel, cuente con antecedentes y no pueda reincidir en ese tiempo.
Esa diferencia se solventará cuando Ronaldo presente su conformidad en el Juzgado de Instrucción número 4 de Pozuelo de Alarcón (Madrid), donde el internacional portugués declaró como investigado hace casi un año, el 31 de julio.
En aquella ocasión, el jugador del Real Madrid afirmó: "La Hacienda española conoce en detalle todos mis ingresos, porque se los hemos entregado; jamás he ocultado nada ni he tenido intención de evadir impuestos".