El paraguayo Juan Ángel Napout, detenido la semana pasada en Zurich cuando asistía a una reunión de la FIFA, presentó su renuncia a la presidencia de Conmebol a través de un e-mail enviado por sus abogados y será reemplazado interinamente hasta esa fecha por el uruguayo Wilmar Valdez.

La conformación del resto del comité ejecutivo, incluyendo los tres vicepresidentes, será decidida en el Congreso del 26 de enero. El ejecutivo de Conmebol se reunirá previamente el 21 de diciembre en Luque, en las afueras de Asunción, con motivo del sorteo de la Copa Libertadores 2016.

El organismo sudamericano busca con esta decisión encauzar el rumbo en medio de la grave crisis que atraviesa como consecuencia de la detención de múltiples directivos acusados de corrupción.

Tal como establece el estatuto de Conmebol, Valdez asume oficialmente la presidencia al quedar como único vicepresidente en funciones tras las detenciones del venezolano Rafael Esquivel en mayo y recientemente del chileno Sergio Jadue, que se entregó a la justicia estadounidense.

En la antesala del encuentro se especulaba con que Valdez podría tener la potestad de completar directamente el mandato de Napout, que vence en 2019, pero al final se decidió convocar a un Congreso electivo.

El presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) señaló en una conferencia de prensa que "es el momento de buscar unidad y consensos" en el fútbol sudamericano y adelantó que, de lograrlo, estaría dispuesto a presentarse a la elección.

Valdez ya es de todas formas el cuarto presidente de la Conmebol desde abril de 2013. Los últimos tres mandatarios -el paraguayo Nicolás Leoz (1986-2013), el uruguayo Eugenio Figueredo (2013-2014) y Napout (2014-2015)- fueron detenidos este año.

Figueredo y Napout aceptaron ya su extradición a EEUU, mientras que Leoz se encuentra en prisión domiciliaria en Paraguay. "Tiene que haber un antes y después en todo lo que pasó", reclamó Valdez.

Tras una reunión de casi seis horas en su cuartel central de Luque, el comité ejecutivo de la Conmebol anunció su intención de implementar "una profunda reforma" de sus estructuras, "incluyendo su estatuto y administración".

"Se ha decidido profundizar la implementación de las medidas de transparencia y control que garanticen una eficaz y rigurosa administración de las operaciones económicas y procesos operativos de la Conmebol ya iniciados en el presente período", señaló en un comunicado.

Para ello, informó la institución rectora del fútbol sudamericano, se designó al auditor y consultor Daniel Elicetche como director independiente de una nueva comisión de Auditoría Interna y Cumplimiento del organismo.

La Conmebol también anunció que se implementará a partir del Congreso del 26 de enero un "programa de responsabilidad social", sin brindar mayores detalles al respecto.

Además, el comité ejecutivo ratificó "de manera categórica" que la entidad continuará "colaborando permanentemente en los procesos de investigación que se encuentran actualmente abiertos".

El organismo apeló por último "a la unidad de todas las asociaciones miembro para poder hacer frente a los difíciles momentos institucionales por los que atraviesa la institución".