Pablo Cuevas, nacido en Concordia pero nacionalizado uruguayo, acaba de consagrarse en el ATP 500 de Rio de Janeiro, tras superar a Nadal en la semifinal. Este lunes apareció en el lugar 27 del ranking.
- ¿Cuáles son las primeras sensaciones como campeón?
- Estoy muy contento por haber conseguido mi primer ATP 500 y sobre todo por la manera en que lo logré. Tuve una semifinal muy especial ganándole al mejor jugador del mundo sobre polvo de ladrillo. En la final me tocó enfrentar a un rival que venía de ganar partidos muy difíciles y creo que hicimos los dos un partido muy bueno y parejo.
- ¿Qué le parece que Guga Kuerten diga que su revés es el mejor del circuito?
- Es un placer que un jugador con un revés, pero sobre todo con un tenis espectacular, diga eso de mi revés. Un placer que me haya entregado él el premio. Tuve la suerte de jugar ante Guga ya en el final de su carrera. Era uno de los tenistas que más admiraba. Me gustaba mucho su estilo de juego y me enorgullece lo que dijo.
- ¿Por qué ha tenido tanto suceso en Brasil, con San Pablo el año pasado y Rio este año?
- Realmente me gusta mucho Brasil. Me ha ido muy bien siempre que jugué aquí, tanto en los torneos challenger como ahora en ATP. Aquí fue donde, después de la lesión, volví a disputar torneos challenger luego de haber estado casi dos años sin jugar. También logré dos de ATP, mi primero de la serie 500, y también es donde sin dudas gané el mejor partido de mi carrera. No sólo me siento bien dentro de la cancha, sino que también me gusta mucho Brasil, sus playas, su entorno. Disfruto cuando juego aquí.
- ¿Qué opinión le merece que hayan llegado dos sudamericanos a la final de un ATP 500?
- Últimamente los españoles han dominado los torneos sobre polvo de ladrillo en Sudamérica. Por eso creo que es muy bueno para el tenis del continente haber tenido a dos jugadores en la final.
- ¿Qué le pareció el tenis de Guido Pella?
- Es un jugador muy completo, talentoso y rápido. Tuvo una semana muy buena, le ganó a Isner en primera ronda y luego a Thiem, ambos entre los 20 mejores del mundo. Sobre todo Thiem, que es un gran jugador en polvo de ladrillo. Me gustaría ver de nuevo la final, pero tengo la sensación de que jugamos un partido muy bueno, que sacamos muy bien. No tengo más que buenas palabras hacia él. Me pone muy contento su presente. Es un buen compañero y una gran persona.
- ¿Se puede comparar la felicidad de ganar Roland Garros en dobles con esta semana en Rio ganándole incluso a Rafael Nadal?
- Son dos cosas muy diferentes. No deja de ser un Grand Slam, pero es compartido. Era más joven y nunca hubiese imaginado en mi carrera un título en dobles en un Grand Slam. Uno siempre piensa en singles. Fue la primera felicidad grande que tuve en una cancha de tenis. Luego vino la alegría de mi primer título de individuales y este de Rio me pone contento, pero especialmente por lo que conseguí en semifinales. Luego es el cuarto título, no voy a decir que no estoy feliz, pero dentro de la cancha no se siente la diferencia entre un ATP 250 y un ATP 500. Tal vez con un Masters 1000 sí se notaría, pero dentro de la cancha no estás pensando en eso.
- Ya con 30 años, dentro de los mejores 30 del mundo, ¿cuál es su sueño próximo?
- Cualquier tenista de Sudamérica sueña con ganar un torneo de Grand Slam y sobre todo Roland Garros. Tal vez eso sea más un sueño que un objetivo en la carrera de cada uno. Creo que me di una buena demostración a mí mismo de lo que puedo lograr en estas canchas. Salí a buscar esto con un entrenador de gran experiencia como Luli Mancini. Que me ayude a poner en práctica mi potencial y me convenza de mi juego durante toda una semana o durante tres horas como contra Nadal. Me ilusiono con seguir mejorando. Estoy en un gran momento mental y físico de mi carrera. Creo que puedo conseguir grandes cosas en polvo de ladrillo.
- ¿Tiene algún secreto para ganarle a cinco zurdos en una semana?
- No lo había visto antes, pero previo a enfrentar a Pella me di cuenta que iban siendo todos zurdos. A medida que iban pasando los partidos me venía bien porque no tenía que cambiar grandes cosas tácticas, sólo ajustar alguna dependiendo del rival, pero me fui acostumbrando y no era algo que me molestara. Creo que si la final, luego de enfrentar a cuatro zurdos, era ante un derecho, me hubiera costado más.
- ¿Tendrá tiempo para festejar?
- Este año soy uno de los cuatro cabezas de serie de San Pablo y puedo tener un par de días más porque tengo libre la primera ronda. Jugaré miércoles o jueves, así que puedo descansar un poco y disfrutar.