Había arrancado con todo San Lorenzo. En diez minutos le había hecho tres goles a Banfield y pasaba al frente del marcador global de la serie de segunda fase de la Copa Sudamericana.

Pero el Taladro marcó uno y el empate 3-3 lo ponía en la siguiente ronda. Hasta que apareció él, para clavarla y hacer delirar al pueblo Cuervo.

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Iban 37 minutos del primer tiempo y en el Nuevo Gasómetro el asunto estaba complicado para el local, que pese a la ráfaga de gritos no le alcanzaba. Hasta que una buena combinación entre Martín Cauteruccio y Néstor Ortigoza terminó en la red.

El uruguayo recibió la pelota del nacionalizado paraguayo, y sin pensarlo se lanzó en una pirueta para conectarla de chilena, y meterla cerca del palo izquierdo de Hilario Navarro.

Así, el Ciclón se puso 4-1 en el marcador, y con el 4-3 global logró el boleto para la próxima ronda del torneo continental.