<b>Fuente: DXTV</b>
La historia entre Carlos Sánchez y River no empezó bien. El uruguayo llegó en 2011 para afrontar la B Nacional y tuvo buenos rendimientos. Sin embargo, Carlos Carbonero le ganó el puesto cuando asumió Ramón Díaz y el uruguayo no fue tenido en cuenta por el técnico riojano, pasando a préstamo al Puebla de México.
Hoy en día, parece imposible -y hasta doloroso- para el hincha de la Banda imaginarse un equipo sin Sánchez. De la mano de Gallardo, el charrúa encontró su mejor nivel y es la principal figura del equipo, además del goleador en torneos internacionales en la era del Muñeco.
Pato (así lo apodan) vive con intensidad cada partido y cansa hasta ver todo lo que corre. Con un ida y vuelta tremendo, mucha marca en el medio, serenidad a la hora de dar un pase y una excelente llegada al vacío en el área, Carlitos es la pieza fundamental de River y está en el pico de su carrera.
En la complicada serie frente al Chapecoense, Sánchez mostró su importancia y peso marcando dos goles en el partido de ida y el gol que le dio la clasificación a River en el partido de vuelta, apareciendo en los momentos que el equipo no se encontraba y en el que más lo necesitaba.
En resumen, en clubes grandes como River siempre hay jugadores que tienen más jerarquía que otros, y Sánchez es uno de ellos. La dirigencia deberá hacer todo lo que esté a su alcance para renovarle el contrato, ya que se le asegurará un plus en cada partido a los de Núñez por mucho tiempo más.