Cada pelea del mexicano Saúl "Canelo" Alvarez es una celebración que la industria del boxeo le hace a su mayor generador de recursos y en paralelo, un homenaje a la potente cultura azteca. Todo sucede a lo grande porque nadie es más grande que él a la hora de hacer dinero. Nadie lleva tanto público a los estadios, nadie vende tantas pantallas de televisión paga y nadie tiene tantos sponsors. "Canelo" mueve las palancas del negocio pugilístico mundial. Aunque tal vez no pueda ser considerado como el mejor boxeador del momento kilo por kilo.
Su combate unficatorio de este sábado en Las Vegas ante el estadounidense Caleb Plant no escapa a este tamaño gigantesco, a veces desmesurado. Alvarez expondrá su triple campeonato de los supermedianos del Consejo, la Organización y la Asociación Mundial e irá por la versión de la Federación Internacional en poder de Plant. Si lo logra, se transformará en el primer peleador latinoamericano que ostente la cuadruple corona de una categoría. Será entonces, una cita con la historia que ESPN transmitirá desde las 22 horas aunque se estima que Canelo subirá al ring del MGM Grand Garden Arena de la capital del estado de Nevada alrededor de las 0.45 de la madrugada del domingo.
La pelea tuvo un anticipo impensado en la conferencia de prensa de presentación del pasado 6 de octubre en un hotel de Beverly Hills. El pelirrojo mexicano es un hombre medido, parco y poco afecto a las declaraciones rimbombantes. Pero en esa ocasión y ante los dichos de su rival, reaccionó con furia, empujó a Plant y debió ser separado por los asistentes y auxiliares que estaban cerca de ambos. Canelo dijo luego que perdió la compostura porque Plant se había referido a su madre con terminos irrespetuosos. Y prometió que le hará pagar la cuenta de su orgullo herido sobre el mismo cuadrilátero de Las Vegas.
Con 31 años de edad, un record de 56 peleas ganadas (38 antes de límite), una derrota ante Floyd Mayweather y dos empates y una bolsa asegurada de 40 millones de dólares que pueden ser varios más cuando se hagan las últimas cuentas de las ventas de la Tv paga, a Canelo se le percibe mas potente que nunca y muy cómodo dentro de los 76,250 kg, límite máximo de la división de los supermedianos en la que parece invulnerable. Plant, por su parte, tiene 29 años y ganó los 21 combates que hizo, 12 de ellos antes del límite. Cobrará apenas 10 millones de dólares y apuesta a imponer su mayor estatura (1,85 metros contra 1,73) y su superior alcance. Su objetivo es el de tantos: detener de golpe las dos máquinas que el campeón mexicano pone en marcha cada vez que sube a un ring: la de ganar y la de hacer dinero.