Boca recibió este viernes dos negativas (del Ministerio de Salud y de la Liga Profesional) que le complicaron el panorama de cara a la segunda fecha del torneo local, donde debe visitar a Banfield el sábado desde las 20.15 y por como están las cosas, deberá hacerlo sin los 24 jugadores (ni el cuerpo técnico) que viajaron a Brasil para jugar con el Mineiro, pero además contemplando que esta mañana la Reserva jugó con todos sus titulares el duelo ante el Taladro.
En este contexto, la dirigencia de Boca analiza qué es lo que hará de cara al partido con Banfield, y lo cierto es que una de las posibilidades en las que piensan es no presentarse a jugar, entendiendo que sin los jugadores ni el cuerpo técnico de Primera, y aduciendo que en ningún momento rompieron la burbuja pese a los incidentes de Brasil, no les corresponde tener que presentarse de todas maneras con jugadores de Reserva o juveniles.
Si finalmente Boca toma la decisión de no jugar el partido de este sábado ante Banfield, se expone a una sanción de triple castigo, según el reglamento de Transgresiones y Penas de la AFA: en primer lugar, lógicamente tendrá por perdido el juego ante el Taladro, que sumaría los tres puntos. Pero además, al Xeneize le quitarían otros tres puntos de la tabla del torneo y también le impondrían una multa económica, por el valor de 2250 entradas populares, que ascendería por encima del millón y medio de pesos.
La última vez que un equipo no se presentó en el fútbol argentino fue el recordado caso de River ante Atlético Tucumán, cuando el COVID-19 recién había llegado a la Argentina y todavía no se había decretado la cuarentena obligatoria, en marzo del 2020. En aquella oportunidad, el Millonario decidió no afrontar su compromiso frente al Decano, temiendo un brote de contagios por un caso sospechoso de un juvenil.
El Tribunal de Disciplina tardó varios meses en fallar, pero finalmente no le quitó puntos a River (de todas maneras, la Copa de la Superliga por la que debían enfrentarse terminó suspendiéndose y nunca más se retomó) y simplemente obligó al Millonario a costear el viaje de Atlético desde Tucumán a Buenos Aires. En aquella oportunidad, el argumento fue que "sería un error someter el caso a los parámetros reglamentarios usuales, teniendo en cuenta que nada ha sido usual durante el 2020", por lo que era razonable ser cuidadoso y comprensivo al momento de aplicar sanciones.
Mientras el Xeneize decide qué hacer para el duelo con Banfield, gestiona la posibilidad de cumplir el aislamiento al cuarto día de haber regresado a Buenos Aires, amparándose en la reglamentación que rige en la Ciudad de Buenos Aires, donde se habla de cuatro días y no siete, como le impuso el Ministerio de Salud y rige en la Provincia de Buenos Aires, por ejemplo. Si le aprueban esta condición, no tendría inconvenientes para presentar equipo en la fecha 3, cuando deba recibir al Ciclón.