Luego del escándalo que vivió el plantel de Boca anoche, donde quedó eliminado de la Copa Libertadores tras un polémico arbitraje ante el Atletico Mineiro, el plantel Xeneize ya regresó a Buenos Aires, donde deberá aislarse por una semana según la disposición del Ministerio de Salud.
Después del partido en Belo Horizonte, se desataron una serie de incidentes en la zona de vestuarios que derivaron en vivió una noche para el olvido, ocho integrantes de la delegación de Boca fueron identificados por la Policía brasileña, que se llevó a todo el plantel a la comisaría para que jugadores, dirigentes e integrantes del cuerpo técnico declararan ante las autoridades de seguridad. Por este motivo, el Ministerio de Salud tomó la decisión de aislar por siete días a todos los que viajaron a Brasil, por temor a que se haya roto la burbuja.
En este marco, el Xeneize debería visitar este sábado desde las 20.15 al Taladro de Sanguinetti por la segunda fecha del torneo local, y si la intención de Boca era suspender el partido por la demora en el regreso a la Argentina y el hecho de haber pasado toda la noche en un micro, ahora que el cuerpo técnico y los 24 jugadores que viajaron a Brasil tienen que aislarse por siete días y no pueden competir, en Boca buscarán la suspensión del partido con Banfield con mucha más fuerza. Sin embargo, durante las horas de la tarde, las autoridades de la Liga Profesional se mantuvieron firmes en que los partidos no se suspenden por motivos de COVID-19. Y si bien no es lo urgente, el encuentro frente a San Lorenzo de la tercera fecha, que se juega entre semana, también entra dentro del período de aislamiento.
Sin embargo, desde la Liga Profesional plantean un panorama distinto, por lo que seguramente se vendrán horas de negociaciones entre ambas partes. Lo que argumenta la LPF es que, según el artículo 29.2 del Reglamento, "los clubes no podrán solicitar la suspensión de partidos por cuestiones vinculadas a la pandemia (COVID-19), salvo que las autoridades gubernamentales impidan la realización del mismo". Como antecedente mencionan el de Independiente varado en el aeropuerto de Bahía, lo que provocó la postergación de aquel choque de Sudamericana pero no del posterior correspondiente a la Copa LPF.
El Ministerio de Salud tendría decidido que la delegación que regreó de Brasil deba permanecer siete días sin contactos con el exterior como parte del protocolo contra el coronavirus.Todo esto a pesar de que el equipo y todos los colaboradores nunca se bajaron del micro para que les tomen declaración y debido a los disturbios.
Por su parte, la ministra de Salud de la Nación Carla Vizzotti se expresó en Radio La Red sobre la posibilidad de tener que realizar un aislamiento preventivo al volver al país tras el escándalo.
"Estamos pidiendo información para evaluar el riesgo respecto de la situación. Claramente es una situación extraordinaria y no se siguieron los mismos mecanismos, Boca tuvo contactos fuera de lo estipulado. Hablaremos con Lammens para tomar una decisión. Apenas tengamos relevada esa información, decidiremos junto con el club cómo trabajarlo", comenzó la ministra. Es que en caso de no romper la burbuja protocolar, la delegación no debería aislarse al regresar. Pero por los hechos que se dieron, con integrantes teniendo que ir a la comisaría a declarar, Vizzotti advirtió el "contacto fuera de lo estipulado" y en las próximas horas habrá una decisión.
Luego, agregó: "Tenemos tiempo para pedir información y evaluar cómo fue el traslado a la comisaría y todo lo sucedido. Necesitamos tener la información oficial y final para analizar profundamente. En función de la versión formal, vamos a tomar determinaciones".