Con Lionel Messi , Javier Mascherano y Sergio Agüero sentados en el banco de suplentes, la selección sacó adelante el amistoso ante El Salvador y le ganó 2 a 0, con pocas luces y sin demasiadas noticias trascendentes ¿Habrá sacado conclusiones Martino? Algunas, siempre atendiendo la jerarquía del rival. Jugó Ramiro Funes Mori desde el arranque, entró Federico Mancuello en el segundo tiempo y convirtió un golazo y Carlos Tevez integró los once titular.
Está claro que definir la lista para la Copa América es el gran objetivo de esta gira, que se completará el martes con el partido ante los Estados Unidos. La idea de no arriesgar a Messi, con una molestia, da una pauta del propósito del cuerpo técnico: observar a algunos futbolistas y terminar la gira sin ningún sobresalto. Javier Mascherano y Sergio Agüero ni siquiera entraron.
El Salvador casi no atacó al arco que defendió Nahuel Guzmán. La Argentina fue protagonista, aunque en el primer tiempo ese rol no lo llegó a cumplir con comodidad. El conjunto centroamericano se defendió muy bien y a la selección le costó quebrar esa barrera. Fueron muy pocas las situaciones de gol.
El equipo argentino pudo quebrar la paridad recién en el segundo tiempo y fue... de carambola. Un remate de Banega se desvió en un defensor y se le coló por arriba al arquero salvadoreño. Carlos Tevez, movedizo en el frente de ataque, fue de lo mejor del seleccionado y se fue reemplazado por Javier Pastore a 13 minutos del final.
De todas maneras, el partido no logró escaparse a la etiqueta de amistoso, sumado al descontento del público que se quedó con las ganas de ver a Messi. Para Martino las prioridades son otras con la Copa América como único objetivo.