Policiales Gualeguaychú

Allanan el domicilio de un abogado denunciado por corrupción de menores

El fiscal de Gualeguaychú decidió abrir una causa de oficio contra el abogado Gustavo Rivas, por corrupción de menores y abusos, tras una denuncia periodística en la que advierten los presuntos delitos.

27 de Julio de 2017

El fiscal coordinador de Gualeguaychú, Lisandro Beherán, decidió abrir una causa de oficio contra el abogado Gustavo Rivas, por corrupción de menores y abusos, tras la denuncia periodística de la revista <i>Análisis</i>.

 

De acuerdo a la publicación periodista, "durante más de 40 años, el abogado, historiador, personaje ilustre de Gualeguaychú y ex candidato a gobernador por la Ucedé, Gustavo Rivas, cometió graves abusos y corrupción de menores en su ciudad. Los cálculos más moderados indican que, por lo menos, corrompió a más de 2.000 adolescentes de entre 15 y 16 años, entre 1970 y más allá del 2010. Les pasaba videos pornográficos; los masturbaba; les practicaba sexo oral; se hacía penetrar o colocar elementos importantes en su ano, en encuentros semanales en su casa".

 

Según se informó, los allanamientos estarán a cargo de la fiscal Martina Cedrés y se realizan en la casa de calle Mitre que habita el abogado a pocos metros de la plaza principal de la ciudad y donde posee su estudio jurídico, en la casa materna de Rivas ubicada en calles Urquiza y 3 de Febrero y en la casa de fin de semana que posee en Pueblo Belgrano ubicada en calles 30 de Noviembre y Larroque.

 

También se indicó que "desde las 6 de la mañana hay un policía apostado en la puerta de la casa, haciendo guardia para evitar la destrucción de pruebas o documentación que pueda ser de interés para la causa".

 

De acuerdo a mencionado por el periodista de diario <i>El Argentino</i> de Gualeguaychú, Diego Elgart, en el domicilio "se vio entrar y salir a su secretario personal, que lo asiste de toda la vida y a quien se lo ve muy ansioso y nervioso, y se pudo confirmar que Rivas está en la casa con un estado depresivo". Dijo que "se supone que Rivas sentía o sabía que algo se iba a hablar de él pero nunca entendió la magnitud de la investigación periodística". Respecto de la denuncia periodística señaló que "los propios vecinos dicen que era algo conocido por todos" ya que "las andanzas de Rivas eran parte del folclore de la ciudad, pero a nadie se le ocurrió atar cabos para dimensionar la magnitud del daño que este este señor le ha hecho a varias generaciones de gualeguaychuenses".

 

 

 

Respecto de la situación y la denuncia periodística, el periodista de Gualeguaychú señaló que "las andanzas de Rivas eran parte del folclore de la ciudad pero a nadie se le ocurrió atar cabos para dimensionar la magnitud del daño que este este señor le ha hecho a varias generaciones de gualeguaychuenses".

 

En ese sentido, contó que "era algo natural para la gente ver en verano el yate del doctor cargado de chicos zarpando rumbo a Las Cañas" y lo describió como "una persona con una habilidad social importante, con un perfil intelectual, una persona de consulta permanente y hasta llegó a ser subdirector de un diario local".

 

Detalló que Rivas "escribió varios libros de historias de Gualeguaychú, tiene un blog que es consultado permanentemente, y tenía una actividad social tremenda: estuvo en la Corporación de Desarrollo, en la comisión directiva del Colegio de Abogados, está en el Club Neptunia, es miembro de la Cooperativa Agrícola del Instituto Agrotécnico, es socio honorario de la Comisión de Carrozas, que era un ámbito ideal para ir viendo el perfil psicológico de los chicos".

 

Puntualizó que "de forma permanente estaba en ámbitos de chicos" y rememoró que "asesoraba a los estudiantes de cuarto año de las escuelas secundarias para el momento en que debieran firmar el convenio con las empresas para el viaje estudiantil a Bariloche". "Muchas veces conseguía mejores precios en los pasajes y en gratitud a su asesoramiento legal los padres y los mismos estudiantes le daban el viaje liberado para que los acompañe en el viaje a Bariloche y hasta dormía en la habitación con los estudiantes, y eso sucedía a la vista de padres y profesores".

 

"Era algo natural, era parte del paisaje urbano ver a Gustavo Rivas en los colegios, las carrozas y era muy respetado por el establishment cultural de la ciudad y por el sector de los abogados, era un permanente presentador de libros, un extraordinario conferencista, muy didáctico y pedagógico, y todo eso daba a pensar que era imposible que el tipo hiciera estas cosas, concluyó. <i>(Análisis)</i>