Un reciente informe del Instituto de Estudios de la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL) de la Fundación Mediterránea advierte sobre las potenciales consecuencias negativas que enfrentaría la economía argentina tras la eliminación del Impuesto PAIS a partir de enero de 2025. Este impuesto, que actualmente encarece las transacciones en el exterior, ha sido una herramienta clave para desincentivar el turismo emisivo, es decir, los viajes de residentes argentinos al extranjero.
El documento destaca que, históricamente, Argentina ha experimentado un desbalance significativo entre el turismo emisivo y el turismo receptivo. Este desbalance ha fluctuado según las condiciones cambiarias, pero la tendencia actual indica un deterioro que podría acentuarse con la eliminación del impuesto. A lo largo de los últimos meses, el ratio de turismo emisivo a receptivo se situó en 1.37, acercándose a niveles preocupantes.
Actualmente, el Impuesto PAÍS agrega un 30% al costo de los gastos en moneda extranjera, elevando el costo del dólar turista a $1,586.40, en comparación con el dólar oficial a $991.50. Sin el impuesto, se proyecta que el dólar tarjeta podría bajar a $1,288.95, lo que fomentaría aún más los viajes al exterior, en un contexto donde el déficit turístico ya alcanza cifras alarmantes.
El Gobierno se encuentra en alerta y analiza alternativas para mitigar esta situación. Una de las opciones consideradas incluye elevar las percepciones a cuenta de Ganancias y Bienes Personales, que actualmente son del 30%, buscando compensar en parte la eliminación del Impuesto PAÍS.
Además, el informe subraya que la salida de dólares por turismo emisivo podría superar los ingresos por turismo receptivo, un fenómeno que ya ha alcanzado niveles críticos. En el primer semestre de 2023, el turismo emisivo demandó USD 3,900 millones, generando un saldo negativo de USD 1,400 millones en la balanza turística.
Se anticipa que la eliminación del impuesto, junto con un tipo de cambio poco competitivo, podría provocar un aumento en la demanda de dólares para viajes al exterior, especialmente en el próximo verano. Las búsquedas de opciones turísticas en línea han aumentado un 54% interanual, lo que refleja un renovado interés por parte de los argentinos en viajar fuera del país.
El informe concluye que, si no se implementan políticas para mejorar la competitividad cambiaria y reducir costos operativos en el sector turístico, Argentina podría enfrentar un incremento significativo en la fuga de divisas, agravando así su situación económica. La presión sobre el balance de pagos se intensifica, y el futuro del turismo en el país queda en entredicho si no se toman medidas adecuadas. (Fuente: Infobae)